La paz a través de la cultura, una mayor proyección internacional mezclando popularidad y calidad, y más complicidad del público extremeño. Esos son los tres elementos fundamentales que persigue la organización del Festival de Teatro Clásico de Mérida, que cumple setenta años, en su 49 edición, en la que está presente un tema de actualidad: no a la guerra, a través la obra La Paz , que abre el evento el 2 de julio, y un concierto el 19 de agosto. El festival concluirá el 23 de agosto, después de presentar cinco obras de teatro, un ballet, y dos conciertos, además de monólogos de cinco actores reconocidos.
No es casualidad que esta edición comience con la obra La Paz , de Arstófanes, en versión de Miguel Murillo, sino que fue una exigencia del Consorcio en un año lleno de conflictos bélicos, "para plantearse la convivencia por la inteligencia y no por la fuerza", manifestó ayer el director general de Promoción Cultural, Hernán Cortés Villalobos. A este obra de teatro le seguirán cuatro más, una actuación del Ballet Clásico de Moscú, y dos conciertos musicales, hasta finalizar el 23 de agosto con Antígona .
Sin embargo, antes, el 18 de junio, el dramaturgo Fernando Arrabal homenajeará a la cultura que se hacía en la II República en España, y el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, descubrirá una placa en reconocimiento de las personas que han hecho posible los setenta años de historia del festival.
ETAPA CUMPLIDA
Este setenta cumpleaños se presenta "a ciegas", señaló el director del festival, Jorge Márquez, y corriendo "ciertos riesgos", haciendo obras de producción propia, evitando "un festival multitudinario sin riesgo". Además, considera que "se ha cubierto una etapa" desde que hace cuatro años se hiciera cargo del festival, al lograr "la proyección internacional, la implicación del festival en la ciudad, y equilibrio entre popularidad y calidad".En opinión del responsable del festival, todas estas circunstancias se han traducido en que Mérida "tiene el sitio que se merece en el concierto internacional", un hecho que, en su opinión, no tiene ningún mérito, porque "muy mal lo tienes que hacer para no poner a Mérida en el lugar que se merece".Pese a todo, el director general de Promoción Cultural, Hernán Cortés Villalobos, anima a que "los ciudadanos de Mérida se impliquen más, porque se ha detectado una cierta apatía de la ciudad con respecto al festival". Tal vez para incentivar al público, la organización venderá las entradas en taquilla a mitad de precio el 6 de julio.A lo largo de julio y agosto, pasarán por Mérida actores como Juan Luis Galiardo, Joaquín Kremel, Natalia Dicenta, Fernando Guillén o Juan Echanove.El próximo año, con el 50 aniversario del festival, se recordará a José Tamayo, director teatral recientemente fallecido.
