Floriano reclama una comunidad menos intervenida por la Junta

Mientras, Ibarra achacó a la oposición que se ha instalado en un discurso negativista que daña la imagen de Extremadura.

CARLOS FLORIANO (PP)

Cambios continuos y parón en las obras

El presidente del PP extremeño, Carlos Floriano, arrancó echando en cara a Ibarra los cambios en el Gobierno de los últimos meses, y aseguró que esos relevos habían supuesto también vaivenes en políticas como vivienda, educación, presupuestos o sanidad. En este punto aludió a la dimisión del consejero de Economía, Manuel Amigo, por el caso de las vallas del paleto, y señaló: "señor consejero, lo mejor que podría hacer es no seguir apedreando su dignidad y marcarse, cumplir su palabra, esta vez sí, irrevocablemente".

Asimismo, afirmó que el presidente de la Junta había repetido muchas de las promesas realizadas hace seis años, como la habitación por enfermo en los hospitales, y comentó que Ibarra es como un entrenador que no da con la alineación adecuada, porque el problema es él mismo.

En el asunto de la refinería, Floriano se preguntó por qué el presidente de la Junta ejerce de portavoz de un empresario privado, y le acusó de haber comparecido en el parlamento en diciembre para hablar de un proyecto "del que no sabía nada" para "tapar la corrupción de su consejero de Economía".

Respecto a las infraestructuras, acusó al Gobierno de Zapatero de frenar la puesta en marcha del AVE, eliminar la línea de mercancías Sines-Badajoz-Puertollano y retrasar las obras de la Autovía de la Plata, mientras Ibarra calla o se "burla" de los ciudadanos en cuestiones como el trazado de la Autovía de Levante.

En el asunto de los fondos europeos, afirmó que Extremadura no tiene por qué pagar lo que se pierda de la PAC, ya que el coste debe asumirlo "su Gobierno en Madrid", y reclamó que el presidente de la Junta pida a Zapatero que utilice el veto en la UE si se pretende un recorte de las ayudas estructurales.

Incremento de las listas de espera en la sanidad y deterioro de la educación pública fueron otros asuntos abordados por Floriano, quien terminó proponiendo a los extremeños "un nuevo camino" donde se sustituya el intervencionismo de la Junta por "menos control y más libertad.

En su réplica, Rodríguez Ibarra, tras afear a Floriano su "constante negativismo" sobre la realidad extremeña, afirmó que "se puede cambiar a personas y la política no tiene por qué cambiar, y el mejor ejemplo son ustedes, que llevan 23 años cambiando cada cuatro de líder y no cambian de política".

Además, defendió la política de vivienda y aseguró que ya hay dos hospitales extremeños con habitación individual. Por lo que se refiere a la refinería, indicó que había mantenido desde el inicio la misma postura, y pidió que todos los que aplauden a la ministra de Medio Ambiente por decir que no se pronuncia hasta que haya impacto ambiental, la aplaudan luego sea cual sea la decisión que tome.

En su segundo turno, Floriano señaló que él no traslada una imagen negativa de Extremadura, "sino que apunto lo que hace mal su Gobierno", para agregar que Ibarra, cuando se le ataca "se envuelve en la bandera".

TERESA REJAS (IU)

Exigencia de que haya una reforma agraria

Desde IU, su portavoz Teresa Rejas planteó a Ibarra "la necesidad de que su modelo económico y social tiene que girar a la izquierda", y le demandó "que no dé una vuelta, como lo está haciendo en los últimos tiempos, al siglo XIX, aunque hable mucho del siglo XXI".

La diputada de IU argumentó que la Junta está basando su modelo económico en la "progresiva y creciente desligación del predominio de lo público" en favor de las empresas privadas, a lo que se une una creciente "falta de democracia".

Además, Rejas recordó al presidente extremeño que había mencionado que se reuniría con las organizaciones agrarias y la Fempex para poner en marcha un proyecto de reconversión agraria, y le reclamó que lleve a la Asamblea una ley de reforma agraria. En cuanto a la situación laboral, Rejas aludió a los datos que sitúan a Extremadura como la región con más desempleo, más precariedad y una renta más baja, y señaló que la siniestralidad laboral ha crecido, cuestiones que, a su juicio, se alejan de la visión "triunfalista" que maneja la Junta.

En la última parte de su intervención, la diputada de IU aludió a la precaria situación de los inmigrantes en Extremadura, el incumplimiento de la promesa de crear en esta legislatura 50.000 empleos y la apuesta del Ejecutivo extremeños por industrias contaminantes como la refinería.

Ibarra replicó a Rejas que insistía, como Floriano, en dar una visión oscura de la región, e indicó que lo que hay que examinar es si en Extremadura se está destruyendo o creando empleo. Respecto a la siniestralidad, apuntó que la región está en mejores índices que la media y en cuanto a la refinería reclamó que defendiese más a los trabajadores y menos a los pájaros.

Finalmente, explicó que si la renta es menor aquí, también lo es el coste de la vida.

F. FUENTES (PSOE)

Acción más allá del compromiso electoral

El turno de intervenciones lo cerró el presidente del grupo socialista, Francisco Fuentes, quien destacó que las actuaciones anunciadas por Rodríguez Ibarra van más allá del compromiso electoral del PSOE del 2003. Fuentes aseguró que su grupo "no tiene razón por ser mayoritario, sino que es mayoritario porque tiene mejores razones". En la línea política de la Junta, destacó el compromiso con la igualdad y la solidaridad, como lo prueba que Extremadura es la región con mayor gasto por habitante en sanidad y educación.

Por lo que se refiere a la acciones para el desarrollo, explicó que que desde el PSOE se apoya a quienes arriesgan para crear riqueza y empleo, pero no a quienes especulan y usan sus influencias para ganar miles de millones con recalificaciones. Del mismo modo, ironizó sobre el "hecho diferencial" de la política extremeña, "donde los líderes de IU revientan las manifestaciones del 1 de mayo y el del PP llama mentiroso al arzobispo de Toledo".

Fuentes dijo que el PSOE encarna en la región el sentido común, mientras la oposición trata de dinamitar el Parlamento y organiza manifestaciones para oscurecer el Consejo de Ministros del 1 de julio en Extremadura.