Gobierno extremeño y oposición se unen para recordar al actual Ejecutivo portugués y al que salga de las próximas elecciones en el país vecino --fijadas para septiembre-- que hay un compromiso firmado entre los dos gobiernos para la ejecución del tren de alta velocidad entre Madrid y Lisboa. Ayer, en la inauguración de la Delegación de Extremadura en Lisboa, tanto el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara; como el líder del PP extremeño, José Antonio Monago, se manifestaron en la misma postura hacia este tema porque se trata de un compromiso ya firmado que no debería romper la fuerza política saliente de las urnas. A este respecto, el ministro luso de Ambiente, Francisco Nunes, presente en el acto, dejó claro que se va a respetar ese compromiso y dijo tener "la firme convicción de que el proyecto va a seguir adelante", pero deja la decisión final al Ejecutivo que gane los comicios. Las dudas sobre el futuro de este proyecto entre los dos países han surgido en los últimos días después de que la oposición al actual Gobierno luso haya mostrado sus reticencias al mismo, al decir la candidata del PSD que si llega a gobernar retirará "inmediatamente" el AVE.
Salga el Gobierno luso que salga "no me cabe ninguna duda de que Portugal respetará el compromiso de los dos estados sobre el AVE" fijado en la cumbre de Figueira da Foz y ratificado en varias ocasiones posteriores en otras citas entre ambos países, reiteró Fernández Vara. En cualquier caso, manifestó su "máximo respeto por la soberanía del pueblo portugués y por las decisiones que tome su Gobierno", pero "parece razonable" que se mantengan los acuerdos ya firmados en esta materia "por tratarse de una infraestructura de esa envergadura". Además, cree que "no habrá un retraso sustancial en el tiempo" de la obra con todo este asunto electoral. El presidente extremeño insistió en que están manteniendo contacto con sus colegas lusos "para defender lo que creemos que tenemos que defender".
En este mismo sentido se pronunció Monago, que visitó a sus compañeros de partido en Lisboa para afrontar esta cuestión. "El acuerdo se firmó en la cumbre de Figueira da Foz y estoy convencido de que los procesos electorales pueden retrasar el proyecto, pero es una decisión ya tomada", indicó. Su deseo, recalcó, es que se cumpla ese acuerdo "y así se lo haré ver a mis compañeros de Portugal", porque "en tiempos de crisis no se deben parar las infraestructuras", destacó, y que proyectos como este "no tienen que estar sujetos a un color político" habiendo ya un compromiso sellado.
El presidente de la Junta insistió en que "en ningún caso lo que se pone de manifiesto es que se aplace la decisión de si va a ver o no alta velocidad, sino que simplemente es la adjudicación de un concurso que entrando como van a entrar ellos en periodo preelectoral será el gobierno que entre el que decida qué empresa lo tenga que ejecutar". En todo caso, señaló que "una infraestructura de estas características tres meses más o menos no aporta nada sustancial". Además, destacó que el AVE Madrid-frontera con Portugal "se está construyendo ya" y reiteró que está "convencido" de que los retornos de una infraestructura de estas características "son tan importantes que el futuro va a ser una realidad", independientemente de cuáles puedan ser sus deseos del resultado electoral."Aquí estoy como presidente de la comunidad y ya he encargado a gente de mi entorno que traslade lo que es nuestra posición y que entendemos que es bueno para todos, y luego que cada partido tome las decisiones que estime oportuno", comentó. Además, el jefe del Ejecutivo regional fue taxativo a la hora de pedir que el PP extremeño ´se moje´ en este asunto y hable con sus compañeros de partido en Portugal --algo que ya ha hecho-- "porque esto lo tenemos que hacer juntos y hay que defender el AVE conjuntamente".
Mientras ese frente común entre Fernández Vara y Monago se cimentaba ayer en Lisboa, desde el actual Gobierno luso se intentó dejar clara cuál es su postura al respecto. El ministro portugués de Ambiente, Ordenamiento del Territorio y Desarrollo Regional, Francisco Nunes, aseguró que el actual Ejecutivo "no va a interrumpir ningún proceso" sobre lo ya acordado entre ambos países, pero que "por razones de legitimidad democrática" será el Gobierno entrante el que decida el desarrollo final del proyecto pendiente, . En todo caso, resaltó que está convencido de que "el proyecto va a seguir adelante", porque es "esencial" para el transporte de Portugal con Europa, y considera que esas dudas sobre el futuro del proyecto dependiendo de quién gobierne se comenzarán a disipar a partir del mes de octubre.
