Por fin llegaron las rebajas, pero, ¿realmente eran tan esperadas este año? El pasado 1 de julio los escaparates de toda la región dieron de baja a sus maniquíes y se empapelaron de grandes y coloridas cifras con las que atraer clientes. Sin embargo, este verano las manos rebusconas en las montoneras de ropa no han sido tantas como en los anteriores, y las que ha habido han escogido con cuidado cada prenda y, sobre todo, cada precio.

La percepción generalizada entre los comerciantes extremeños es la de que las rebajas se han iniciado sin demasiada alegría en las ventas. Es el caso de José Luis Ventura, gerente de Confecciones e Industriales Grupo Vera-Elena, en Plasencia, que subraya que, en épocas de crisis económica, los productos textiles y de calzado pasan a un segundo plano, ya que las prioridades de los consumidores se centran en atender otros gastos más básicos, como pueden ser los productos de alimentación o las hipotecas.

Estas rebajas comenzaron ya con agresivos descuentos de hasta el 50%. Domingo Poves, gerente de la Asociación Comercial del Casco Antiguo de Badajoz, señala que con ellos se buscaba compensar al menos en parte el bajo nivel de ventas registrado esta primavera y que fue propiciado en buena medida por las malas condiciones climatológicas de mayo y parte de junio. "Las rebajas han comenzado más o menos bien", explica Poves, para quien, además, las cosas pueden ir a mejor en agosto. Poves basa este pronóstico en que éste es el mes escogido por muchos emigrantes extremeños para regresar a sus localidades de origen y en que confía en que se produzca un incremento de la afluencia de turistas portugueses. Aunque reconoce que la crisis se palpa en el sector, opina que "la necesidad de los clientes de comprar ropa y calzado para vestirse no va a desaparecer", por lo que se muestra relativamente optimista.

El presidente de la Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres (Aeca), José Rojo, sostiene, por su parte, que "la previsión para las rebajas de esta temporada es regular, y no se espera que mejore". De la misma manera, lamenta la psicosis que, a su juicio, se ha generado en torno a la situación de crisis económica y que considera que está perjudicando a los comerciantes.

Por último, Eugenio Montosa, miembro de la Asociación de Comerciantes de la Zona Centro de Mérida, cree que en estas rebajas se observa un cambio importante en la actitud de los consumidores, ya que los clientes están comprando en menor medida por impulso, "lo que hace que las previsiones para este año estén algo por debajo de la media respecto a los anteriores".