El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, anunció ayer que el Gobierno regional llevará a cabo una profunda reforma forestal para tratar de evitar en lo posible que se repitan los incendios que han asolado en las últimas semanas la comunidad autónoma. Y es que en esos días el fuego ha devastado, sólo en el frente de Las Hurdes, unas 8.500 hectáreas.

Rodríguez Ibarra, que se reunió ayer en la localidad hurdana de Pinofranqueado con los alcaldes de los municipios más afectados por las llamas, dejó claro tras sobrevolar la zona afectada que la región ha vivido "una catástrofe" con uno de los incendios más graves de los últimos veinte años.

El presidente extremeño adelantó que el Gobierno regional aprobará una ley de la naturaleza "menos proteccionista, sobre todo a la hora de hacer cortafuegos" para que éstos tengan que ser más anchos, para lo que "seguramente habrá que sacrificar parte de la estética, en aras de la eficacia a la hora de apagar un fuego, para que las llamas se queden en un perímetro cerrado". Ante esta norma pidió "comprensión" a las organizaciones ecologistas, puesto que esta medida tratará de evitar que la gente pierda su medio de vida.

Por lo que se refiere a la reforestación de las zonas quemadas, avanzó que se intentará conjugar la plantación de especies de rápido crecimiento con las autóctonas "para que no se perjudique la zona". También dejó claro que las ayudas serán "urgentes y todas las que haga falta", por lo que emplazó a los alcaldes a comunicar a la Junta cuanto antes los casos más urgentes, es decir, el de aquellos vecinos que lo han perdido todo en los incendios.

SIN VALORACION ECONOMICA

En cuanto a los daños, Ibarra no se pronunció puesto que todavía no se ha realizado ninguna valoración, aunque tiene claro que serán muy elevados. No en vano, apuntó, sólo en el incendio de Las Hurdes han ardido ya en torno a 8.500 hectáreas.

Mientras, el alcalde de Pinofranqueado, José González de Cáceres, calificó a los pirómanos de "terroristas", y solicitó duras condenas para estas personas.

Por su parte, Gervasio Martín, presidente de la mancomunidad, apuntó que aunque la situación es catastrófica "los hurdanos somos duros y vamos a salir de ella con todos nuestros esfuerzo y con los apoyos hoy prometidos". Sobre la repercusión que el fuego pueda tener en el sector turístico de la zona, insistió en que sigue habiendo "mucho que ver".

TRANQUILIDAD

Como buena noticia cabe destacar que el avance del fuego quedó ayer frenado por fin. De esta forma, el buen trabajo de los equipos de extinción y la mejoría de las condiciones climatológicas permitieron que la situación mejorase notablemente en los doce incendios que el viernes por la tarde continuaban activos. De hecho, al cierre de esta edición sólo continuaba incontrolado uno de los focos del incendio de las Hurdes, en Ovejuela, aunque los bomberos esperaban aislarlo a lo largo de la noche si el viento lo permitía.

El resto de los fuegos quedaron totalmente controlados o sofocados entre la noche del viernes y ayer mismo, según los datos del Gobierno regional, aunque el Gabinete de Crisis continuó activo ante posibles complicaciones.

Por otra parte, la Junta informó de que el Rey Don Juan Carlos contactó personalmente con Juan Carlos Rodríguez Ibarra durante la noche del viernes para conocer de primera mano la situación y trasladar su "cariño y ánimo" a la población extremeña.