El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, huyó ayer del optimismo al analizar los resultados de la Encuesta de Población Activa del tercer trimestre, que refleja que el paro bajó en 70.800 personas en el país, mientras la tasa descendió más de tres décimas, hasta el 19,79 de la población activa.

Desde Bruselas y en un tono similar al del presidente de la Junta extremeña, pidió calma y prudencia porque, dijo, todavía queda por delante "un camino difícil y largo" para lograr la recuperación del empleo. Añadió, que se trata de cifras positivas porque muestran que 70.000 personas han encontrado trabajo, pero queda una "muy ardua" tarea por delante que exige "una gran tenacidad" y cumplir las reformas. Para ello, es necesario que la economía se ponga a funcionar con un mayor rendimiento y lograrlo, tras la grave crisis padecida, "va a costar trabajo", insistió. "Independientemente de todo, la tasa de paro sigue siendo muy alta; aunque tengamos una cierta reducción, no podemos expresar ni un ápice de satisfacción", recalcó.

Así lo entiende también la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), que aunque celebró el descenso del desempleo afirmando que los datos de la EPA revelan "que el ajuste del empleo está llegando a su fin", avisó de que la tasa de paro se mantendrá en el 20% al cierre del año, el doble de la media de la Unión Europea. La patronal manifiesta también que el aumento del empleo en este periodo se ha concentrado en el sector servicios, y que, por tanto, ha venido propiciado en gran medida por "factores estacionales asociados al periodo estival".

Por su parte, la responsable de Organización del Partido Popular, Ana Mato, aseguró que, a pesar de la reducción del desempleados, está demostrado que "España no remonta" y que las medidas del Gobierno no sirven para atajar los problemas económicos. Como causas de ese estancamiento arguyó el incremento del trabajo precario y del número de parados de larga duración, entre otros. A su juicio, ante esta situación, el Gobierno "sigue sin rumbo", abundó.