Los hosteleros extremeños no se sienten suficientemente informados sobre la aplicación de la nueva ley antitabaco y se quejan de tener que compaginar su labor cotidiana con la de "fiscalizar" si algún cliente enciende un cigarrillo. Así lo indica el presidente de la Confederación Empresarial de Turismo de Extremadura (CETEx), José Luis Ascarza.

Sobre la normativa que entró en vigor ayer, Ascarza ha asegurado que en Extremadura, de momento, "por respeto, se fuma fuera" porque clientes y empresarios "tienen dudas".

CETEx recibe desde esta mañana muchas consultas de empresarios con "incertidumbres", que preguntan sobre lo que tienen que hacer o cómo actuar ante distintas actitudes de los clientes.

También solicitan documentación, cartelería o las actas para imponer sanciones por fumar en los locales.

Los hosteleros de la región han expresado sus "quejas", al tener que compaginar su labor diaria con "la de la policía, fiscalizando en una inspección continúa quién está comportándose, quién se despista y enciende un cigarro o quién lo enciende y no se despista".

Ante ello, Ascarza defiende que la mencionada normativa debería aplicarse de forma "paulatina" en el sector hostelero, y que así lo deberían entender las administraciones central y autonómicas, porque, a su juicio, "los clientes no llegan a acostumbrarse y al tomar café se encienden un cigarro sin ton ni son".

El representante de CETEx agrega que en Extremadura, al igual que otros lugares del país, se están buscando alternativas, como el uso de terrazas o instalaciones nuevas al aire libre, dado que "aunque se pase frío, seguro que el fumador tendrá que buscar esas zonas abiertas para fumar".

No obstante, apunta que estas terrazas sólo pueden ser ofrecidas por aquellos hosteleros que tengan "suelo cercano o veladores".

En este sentido, critica que este tipo de medidas, como ya se hizo en 2006 al instalar mamparas y lugares apartados para fumadores, "corren a cuenta y a costa" del empresario, que luego "no ve recompensa ni posibilidad de recuperación".

Al respecto, apunta que muchos empresarios dejarán los espacios habilitados para fumar en el interior de sus locales porque en otros países se ha dado "marcha atrás en la aplicación de la ley en el sector".