La iglesia extremeña lanzó ayer un nuevo mensaje de ánimo a los ciudadanos y condenó unánimemente los atentados del pasado jueves en Madrid. El primero en hacerlo fue el arzobispo de la Archidiócesis de Mérida-Badajoz, Antonio Montero, quien pidió que el Estado de derecho "actúe con contundencia" y que toda la sociedad colabore con las fuerzas del orden público.

En la misma linea se expresó el obispo de Coria-Cáceres, Ciriaco Benavente, durante el solemne funeral que presidió en la concatedral de Santa María en recuerdo a las víctimas del atentado. Benavente calificó de horrible la tragedia y alabó el trabajo de los periodistas y los cámaras "que nos han ahorrado --subrayó-- el espectáculo dantesco de los cuerpos destrozados".

Insistió en que la "ignonimia del atentado" ha sido condenada por millones de voces y ensalzó la actitud de los distintos grupos políticos del estado español que "han sabido --comentó-- estar a la altura" y, con ello, "han dignificado la vocación política".

El prelado cacereño alabó la "admirable oleada de solidaridad" y destacó la labor realizada por bomberos, sanitarios, taxistas, fuerzas del orden público y voluntarios. Monseñor apostó en su mensaje de ayer por la libertad y la paz y dijo que le quedaba "la sensación de que nos faltan las palabras".

SIN JUSTIFICACION Añadió que "ninguna causa o razón justifican acciones como las que hemos vivido" y aseguró que "el terrorismo es la idolatría que niega al Dios de la vida". Finalmente, hizo una llamada a los fieles para que acudieran masivamente a las urnas porque, aseguró, "emitir nuestro voto es seguir apostando por el futuro".

A la misa funeral acudieron el alcalde de Cáceres, José María Saponi; el subdelegado del Gobierno, José Diego Santos; el teniente coronel de la comandancia, Luis Iglesias Martínez; el teniente coronel jefe del Cimov, Domínguez Valor; el comisario jefe provincial, Ricardo Beltrán y el segundo comisario, Julio Díaz.

También el obispado, el cabildo catedralicio y los sacerdotes del Arciprestazgo de Plasencia celebraron el viernes una misa en la que "pedimos al Señor por las víctimas y sus familiares y rezamos juntos por la paz y el cese de la violencia terrorista".

El obispo placentino Amadeo Rodríguez reiteró en un escrito su reprobación y consternación por el "brutal atentado terrorista" ocurrido en Madrid.

EN BADAJOZ En la capital pacense también hubo misa el viernes. El arzobispo extremeño recordó que el rencor sólo conseguirá "otorgar, además, a los terroristas el privilegio siniestro del doble asesinato, de la vida de unos y de la esperanza de otros".

Por ello animó "a buscar cada cual en el propio corazón los mejores sentimientos, actitudes y acciones", y a mostrarse "todos contra el terrorismo, todos con sus víctimas y nadie en colaboración directa o indirecta con quienes lo practican".

El templo estuvo abarrotado de personas, entre las que se encontraban el alcalde de la ciudad, Miguel Celdrán, junto a algunos concejales de la corporación municipal, el presidente de la diputación provincial, Juan María Vázquez, el delegado del Gobierno en Extremadura, Oscar Baselga, y el presidente del PP, Carlos Floriano. Durante la homilía, el arzobispo recordó a las víctimas del atentado.