La Dirección General de Consumo intervino a lo largo del año pasado algo más de un centenar de juguetes de tres modelos distintos al considerarlos peligrosos para los niños. El volumen de estos peligrosos entretenimientos ha descendido espectacularmente en los últimos años debido a los férreos controles que impone la Unión Europea, según apuntan desde la Junta.

La directora general de Consumo del Gobierno regional, Nuria Sánchez, explica que durante el 2002 su departamento se incautó en las jugueterías extremeñas de algo más de cien juguetes calificados como peligrosos. El más habitual volvió a ser el puntero láser, que aunque no es estrictamente un juguete se incluye entre los mismos al ser utilizado de forma habitual entre los niños. Sánchez lamenta que se continúe intentando vender este producto --del que se intervinieron 74 unidades-- a pesar de que se sabe que puede dañar la retina.

CONFUSION PELIGROSA

Consumo también retiró del mercado regional 27 unidades de un llavero con un muñequito silbador cuyo peligro radicaba en que era muy fácil que un pequeño se lo tragase. Por último, se requisaron 5 unidades de un puzzle con piezas tóxicas. A esto hay que sumar la inmovilización de una lámpara con forma de muñeca que podía provocar confusión en los niños provocando algún accidente grave.

Nuria Sánchez señala que los controles marcados por la UE han frenado en los últimos años la proliferación de estos artículos para niños que resultan nocivos para la salud. Además, las comunidades autónomas comparten una red de alerta que se activa ante la presencia de cualquier juguete no recomendable .

Por otra parte, la responsable regional de Consumo avanza que una vez más se ha puesto en marcha en la comunidad una campaña de control sobre las luces de Navidad porque algunas de las bombillas, especialmente las que se venden en algunas tiendas de Todo a Cien , se rompen con facilidad "y pueden ser peligrosas para los niños".