José Manuel Calderón, recién proclamado campeón del mundo de baloncesto con la selección española y, por ello, galardonado con el Premio Príncipe Felipe, destacó que desde niño su obsesión siempre fue el baloncesto, "soñaba con jugar en la NBA y ganar un Mundial", pero nunca había imaginado que podían entregarle la Medalla de Extremadura, "el mayor reconocimiento que podré recibir en mi carrera".

El jugador de los Toronto Raptors, natural de Villanueva de la Serena, se comprometió a "pregonar a los cuatro vientos que soy extremeño. Llevaré a Extremadura por donde quiera que vaya, quiero convertirme en un embajador de nuestra comunidad". Además, hizo un llamamiento para "aunar esfuerzos y exaltar a nuestra región".