En Primaria le llegó la pasión por la ciencia y el afán por la experimentación. Con el tiempo cree que se la supieron transmitir sus profesores de matemáticas, ciencias naturales, química... y a medida que fue creciendo, ese entusiasmo no decayó. Nacida en Badajoz hace 54 años, Julia Marín es doctora en Ciencias Biológicas, enóloga y profesora en los grados de Enología y Química además de investigadora en la Universidad de Extremadura. Actualmente está centrada en el control de los compuestos responsables de la tipicidad varietal de determinadas variedades de uva y en la caracterización de vinos monovarietales en base a su perfil polifenólico y análisis del color. De su trabajo lo que más valora es estar en continuo aprendizaje: «no hay cabida para la rutina». A lo largo de los años como investigadora, asegura que nunca ha sentido que lo haya tenido más complicado por el hecho de ser mujer ni tampoco considera que el trabajo de estas tengan menos visibilidad, «lo que sí ocurre es que quien difunde o transmite los resultados obtenidos suele ser el jefe del equipo o del centro de investigación que, mayoritariamente, suele ser un hombre». Luego, los problemas que afectan a la falta de dotación presupuestaria son comunes y «las dificultades en el campo de las ciencias, en el ámbito universitario, no están asociadas a ningún género».
