La actividad de la refinería que se ubicará en Tierra de Barros generará para las arcas regionales unos ingresos por impuestos que rondan los 750 millones de euros anuales. Con este dinero podrían, por ejemplo, pagarse más de 300 kilómetros de autovía, construir 40 hospitales, pagar dos tercios del gasto sanitario total de la región o comprar todos los libros de texto de los escolares extremeños cuatro veces y media. Este proyecto, que ha causado satisfacción entre los empresarios extremeños, supondrá, según anunció el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el cobro anual en concepto de IVA e Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH), de unos 2.000 millones de euros.

Según el acuerdo de financiación autonómica, Extremadura tiene cedida el 35% de la recaudación por IVA y el 40% por IEH, con lo que unos 750 de los 2.000 millones irían a las arcas del Ejecutivo extremeño.

De este modo, los ingresos por estos conceptos se irían a más del doble de lo que se recauda actualmente. Así, el tramo cedido del IVA supondrá el próximo año para la región ingresos de 372 millones de euros. Mientras, todos los impuestos especiales (hidrocarburos, alcohol y tabaco) suman ahora 252 millones.

BENEFICIOS MILLONARIOS En cuanto a los beneficios para los promotores de la iniciativa, según el estudio previo realizado cuando se daban los primeros pasos del proyecto, el refino es la actividad relacionada con el mercado petrolero que más rentabilidad produce.

Dicho informe señala que el beneficio bruto por litro de petróleo refinado ronda los tres céntimos, con lo que para la producción prevista por la planta extremeña --unos seis millones de toneladas anuales-- la ganancia antes de impuestos sería de unos 180 millones de euros.

Otro aspecto relevante atañe a los posibles beneficios para los consumidores de la zona próxima a la refinería. En este sentido, cabe señalar que según un sondeo realizado por EL PERIODICO en los territorios próximos a las refinerías que ahora funcionan, el precio del litro de gasolina es once céntimos más bajo de media, mientras que el gasóleo ronda los siete céntimos más barato por litro.

Respecto a las cuestiones medioambientales, el informe antes aludido indica que el mayor problema lo constituye el fueloil, muy contaminante. Sin embargo, en el proyecto avanzado por Ibarra se contempla que no haya producción de este compuesto.

Esta puede ser la causa de que la inversión inicial haya pasado de 900 millones a 1.200.

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