La Junta de Extremadura ignora el paradero de dos hermanos rumanos, una niña de 11 años y un niño de 6, que tenía acogidos en el centro de menores San Juan Bautista de Badajoz. Los menores estaban bajo la tutela de la Administración regional desde el pasado 15 de octubre y apenas diez días después, el 26, el abogado de los padres denunció en el Juzgado de Herrera del Duque, competente en el caso, la desaparición de los niños, según consta en un escrito remitido a ese juzgado.

Los desaparecidos son hijos de

Florica R., de 34 años, abuela de la niña de tres años fallecida el pasado domingo de una paliza en Talarrubias y a la que la Junta retiró la tutela de sus tres hijos menores --los dos desaparecidos y otra niña de 2 años que sigue en el centro-- y de sus dos nietas, entonces a su cargo, por un presunto delito de malos tratos.

CONFUSION Este asunto estuvo ayer rodeado de confusión, puesto que la Junta ofreció dos versiones no coincidentes. Por un lado, la Consejería de Igualdad y Empleo, de la que dependen los servicios de guarda y tutela y centros de menores, imputó a la madre de los niños la responsabilidad de su desaparición. Así, según recogió la agencia Efe de la citada consejería "la abuela de la niña fallecida en Talarrubias ha raptado a dos hijos suyos cuando estaban acogidos por la Junta de Extremadura en un centro de Badajoz". Según esa versión "la madre se llevó a sus hijos sin permiso cuando estaban fuera del centro". La nota añadía que la Administración no había precisado "las circunstancias ni cuándo se produjo el rapto" pero sí que hay una investigación en marcha y que se había presentado una denuncia contra la mujer, que tiene a otro hijo acogido en el mismo centro.

Ante las reacciones que esta noticia provocó, la Junta emitía más tarde un comunicado en el que descartaba que se hubiera producido el rapto de los niños por parte de su madre: "En ningún caso se trata de un secuestro con allanamiento del centro por parte de ningún familiar", sino que estos niños se encontraban en el centro en régimen abierto y "por causas que la administración desconoce, y que se esclarecerán a través de la investigación que se está llevando a cabo, decidieron marcharse, encontrándose hasta el momento en paradero desconocido".

Estos hechos, añadía la Junta, fueron puestos en conocimiento de las autoridades competentes, "pues en estos casos solo se puede comunicar la desaparición de los menores acogidos a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que son los encargados de realizar las investigaciones oportunas para localizar a los menores y averiguar las causas de su desaparición".

Fuentes policiales confirmaron que la investigación se mantiene abierta y que para intentar facilitar la localización de los dos menores desaparecidos se han distribuido fotografías de ambos en comisarías de Policía y cuarteles de la Guardia Civil.

VERSION DE LA FAMILIA En algunos medios se interpretó la información facilitada como que había sido ayer cuando se había producido la desaparición de los niños y denunciado el caso por la Junta a los cuerpos de seguridad, pero fuentes oficiales indicaron a este diario que "aunque la noticia ha salido hoy a la luz, la desaparición tuvo lugar hace ya algunos días, hacia finales de octubre", concretaron.

Este hecho fue ratificado por el abogado de Florica R., madre de los niños, que fija la desaparición en el 26 de octubre. Fue ese día, indicó a este diario, cuando Florica y su marido acudieron a visitar a sus hijos "encontrándose con que los dos mayores no estaban en el centro".

Tres días después, el 29 de octubre, esta circunstancia era puesta en conocimiento del Juzgado de Herrera del Duque que instruye el caso abierto contra Florica R, por un presunto delito de maltrato. En el escrito, al que ha tenido acceso este diario, se indica que "ante la gravedad de los hechos, interesamos del Juzgado la adopción de las medidas oportunas para preservar la seguridad e integridad de los menores".