El cargo de secretario regional es gafe en el PP. Si ya abrió la crisis en Madrid, ahora ha impedido el acuerdo en Extremadura. Puesto que Génova abogó por el consenso, éste parecía posible a las cinco de la tarde. La mañana y una parte de la tarde se habían mantenido reuniones iluminadas por los órganos nacionales.

La proporción de 60-40, que era del gusto de Acebes, no parecía problemática, los nombres podían acordarse y faltaban los flecos del reparto de cargos. Baselga pedía la secretaría regional, al parecer una aspiración aceptada por Acebes y Floriano. Pero la cosa se torció. Según los ´Baselgas´, Floriano se desdijo y sólo ofreció una vicesecretaría o una secretaría adjunta de nueva creación. No fueron suficientes las llamadas a Madrid, ni la intervención de los cargos nacionales presentes, ni las reuniones en el claustro. Una vez más se demuestra que quien ´organiza´ un congreso y lo pierde es imbécil.

El partido no sale dividido. Está dividido. Si se hubiese llegado a un acuerdo seguro que habría existido un gran número de votos en blanco e incluso abandonos del congreso. Porque lo que le pedía el cuerpo al personal era humillar al contrincante. Los discursos fueron un ajuste de cuentas. En dos cosas coincidieron: que Aznar ha sido el mejor presidente de la democracia y que ganarían a Ibarra. Y usted que lo vea.