Cualquier paciente que precise asistencia médica debería recibirla sin tener que esperar, pero ellos más que cualquiera. Son los más de 4.000 pacientes que, según datos del Sistema Extremeño de Salud (SES) al cierre del segundo semestre de este año han superado el tiempo máximo de espera para una intervención quirúrgica (180 días) o una consulta con un especialista (60 días). A ellos, se sumarían los que están pendientes de que se les realice una prueba diagnóstica (30 días), cifra que no está disponible.

El retraso afecta sobre todo a las consultas externas, es decir, las visitas al especialista, para las que 4.173 extremeños llevan esperando más de los dos meses que la Ley de Tiempos de Respuesta en la Atención Sanitaria fija como máximo. A estos se añaden los 15 extremeños que llevan más de medio año pendientes de ser sometidos a una intervención quirúrgica, lo que supone una reducción considerable con respecto a los 205 que se encontraban en esa situación a finales del año pasado.

Junto estos 4.308 que han superado los tiempos máximos de espera, otros 58.411 extremeños están a la espera de recibir asistencia médica. Esto supone que actualmente son más de 62.700 los pacientes que conforman las listas de espera de la sanidad pública extremeña, en los que se cuentan, aparte de los que deben ser operados o visitar a un especialista, los que precisan una prueba diagnóstica.

En este último caso, el tiempo máximo de espera es de un mes, si bien es más complicado cuantificar cuántos pacientes lo superarían, porque se contabilizan las revisiones que, por ejemplo, pueden programarse para dentro de un año. De ese modo, quedaría registrado que el paciente sufre una demora de 11 meses, que en la práctica no es real.

REPUNTE A FINAL DE AÑO En cuanto a la evolución de la cifra de personas en listas de espera, esta disminuye en casi 3.000 pacientes con respecto a diciembre del 2008, cuando había 65.667 en esta situación. En cambio, si se toma como referencia el año pasado, el número de extremeños que esperan algún tipo de asistencia sanitaria aumenta en 700, de modo que se mantendría más o menos estable.

Según explica el coordinador general del SES, Vicente Alonso, ese incremento de la cifra de pacientes en el segundo semestre con respecto al primero suele producirse todos los años. Desde su punto de vista, puede estar relacionado con la disminución de la actividad sanitaria en el periodo estival, si bien destaca que "nunca llega a niveles alarmantes" y afirma que es habitual en cualquier sistema de salud.

Por tipos, actualmente se contabilizan 13.479 extremeños a la espera de una intervención quirúrgica, 34.452 pendientes de asistir a la consulta de un especialista y 14.788 que precisan una prueba diagnóstica. Aunque en total son 3.000 menos que en el 2008, Alonso resta importancia a ese dato y prioriza la evolución de los tiempos de espera --"si son miles pero los atendemos en días es mejor que si son cientos y tardamos años en darles respuesta", considera--.

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