Extremadura tiene la segunda tasa de paro más alta del país, solo por detrás de Andalucía (12,5%) a pesar de que en los últimos cuatro años se ha reducido casi cuatro puntos --ha pasado del 16,1 al 12,3%--. Incluso el dato podría ser aún mejor si no fuese porque el desempleo ha aumentado en la región en los últimos doce meses, coincidiendo con un nuevo incremento de la población activa.

Desde el 2004 se han generado en la región cerca de 35.000 empleos, 21.000 personas más activas y se ha reducido la cifra de desocupados de 75.500 a 59.000 personas. De hecho, en estos momentos, el número de ocupados y de activos es el más alto de la década --a estas alturas del año--.

No obstante, persisten circunstancias como el hecho de que la tasa de paro femenino (17,9%) duplica la masculina (8,6%) o que la temporalidad sigue marcando la pauta en la contratación: el 94% de los contratos firmados en octubre eran temporales.