NACIO EN CORDOBA, HACE 43 AÑOS FORMACION FISICO, DOCTOR EN CIENCIAS FISICAS CON LA ESPECIALIDAD DE FISICA NUCLEAR

ES PROFESOR TITULAR DEL AREA DE FISICA ATOMICA, MOLECULAR Y NUCLEAR Y DIRECTOR DEL DEPARTAMENTO DE FISICA DE LA UNIVERSIDAD DE EXTREMADURA

Miguel Jurado es experto en físico nuclear y, como tal, puede aclarar muchos de los aspectos vinculados al Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos radiactivos de alta actividad cuya futura construcción y, sobre todo, ubicación están generando tanta expectación y polémica. En su opinión, la necesidad del ATC no es opinable, aunque sí el método elegido para decidir su ubicación.

--¿Por qué es necesario construir en España un ATC justo ahora?

--Actualmente, los residuos de las centrales nucleares son todos radiactivos porque los reactores son de fisión, ya que aún no se ha conseguido producir energía a gran escala mediante la fusión. Este otro proceso consiste en unir dos núcleos de átomos ligeros en vez de dividirlos y es muy ventajoso, porque no genera residuos radiactivos y, además, se utiliza un combustible inagotable (el hidrógeno), a diferencia de la fisión, para la que se precisa Uranio 235, más difícil de obtener y limitado.

Por lo tanto, la fusión nuclear sería la panacea, pero el problema es que actualmente, el coste energético es superior al beneficio que se obtiene. Sobre este procedimiento hay mucha investigación en todos los países, pero a nivel tecnológico para producir energía aún faltan décadas para que pueda ponerse en marcha.

--Por tanto, a la espera de ese futuro ideal hay que buscar soluciones.

--Claro, entretanto, las centrales siguen generando residuos radiactivos y, de momento, tanto el combustible gastado como los desechos de alta actividad (los de media y baja van al almacén de El Cabril, en Córdoba) se están almacenando en las piscinas de las centrales. Este almacenamiento en húmedo se utiliza para aprovechar un espacio disponible en estas infraestructuras, aunque ya están empezando a saturarse.

Por ello, es preciso construir un espacio en el que poder almacenar los residuos en seco, lo que en mi opinión es más adecuado porque el material radiactivo se puede concentrar, ocupando menos espacio y minimizándose las posibilidades de fuga. En cualquier caso, se incluyen varias barreras de seguridad, para evitar la fuga de radiaciones.

--¿Con cuánto tiempo cuenta España para resolver ese problema?

--Creo que quedan muy pocos años, 10 a lo sumo. En algún caso el transporte ya es realmente inminente (cuestión de cinco, seis, quizá ocho años).

--De hecho, ya se ha recurrido a almacenar residuos nucleares fuera, en concreto los de la central de Vandellós I en Francia.

--Así es y, según el contrato, deben regresar a finales de año.

--Pero el ATC tampoco será la solución definitiva, sino temporal.

--Sí, es una instalación que estará cerca de la superficie, con varios blindajes de seguridad para evitar el escape de radiactividad. Es temporal mientras se buscan emplazamientos más definitivos (como un Almacenamiento Geológico Profundo) y se fijan las pautas sobre cómo deben ser estos.

--¿Pero es de verdad temporal? Mucha gente cree que es un adorno para reducir oposición...

--Sí es temporal, porque es una solución provisional hasta que se encuentre la definitiva. Lo que es difícil es cuantificar la temporalidad, porque esa solución definitiva no se sabe si se logrará en 20 años o más (la vida útil del ATC prevista son 60 años, pero el ministro ha dicho que podría recortarse a 20). Depende de cuándo se tengan claros los requisitos que debe cumplir el emplazamiento definitivo.

--¿Y los blindajes de seguridad, hasta qué punto son efectivos?

--Aseguran que la radiactividad no tenga ninguna probabilidad de escape, puesto que la seguridad es enorme. Un posible problema sería, por ejemplo, un seísmo, aunque se sitúan en zonas de bajo riesgo y están diseñados para resistirlos.

--Pero mucha gente cree que parte de la radiactividad se propaga y genera enfermedades como el cáncer.

--Eso suele decirse en las zonas donde hay centrales o residuos nucleares, pero yo no creo que estadísticamente esté claro que haya una mayor incidencia de ese tipo de patologías. De hecho, en la Uex se controlan los niveles de radiactividad del entorno de la central de Almaraz, por ejemplo, y son similares a los del fondo radiactivo ambiental y, en todo caso, están muy por debajo de los límites que marcan los organismos de radioprotección.

--¿Tampoco hay afección sobre el medio ambiente o los bienes agrícolas cercanos?

--No, solo la habría si hubiera un escape. Para evitar ese riesgo, como en cualquier infraestructura nuclear, se diseñan barreras de prevención y seguridad realmente eficaces.

--¿Qué opina usted sobre el ATC y su futura ubicación?

--Creo que la instalación de un ATC no es opinable, porque es totalmente necesario. Si asumimos que las centrales han sido y son imprescindibles, lo es también responsabilizarnos de sus residuos. Lo que sí es opinable es dónde ubicarlo y creo que debe ser donde cumpla todas las especificaciones técnicas requeridas, con independencia de cuestiones de más índole política.