La primera causa de muerte y de ingreso hospitalario en Extremadura. Esta es la desagradable tarjeta de presentación de las enfermedades cardiovasculares que, además, son el segundo motivo por el que los extremeños pierden más años potenciales de vida --al fallecer antes de cumplir los 75, según el criterio fijado por el SES--. Así se desprende de los datos de la Junta, que ayer anunció su intención de implantar un sistema de gestión empresarial en los nuevos hospitales de la región para acortar las estancias de los pacientes.
Dentro del grupo de dolencias circulatorias, la enfermedad cerebrovascular --que se manifiesta, por ejemplo, en el ictus--, la enfermedad isquémica del corazón --insuficiencia del volumen de sangre que suministra oxígeno al corazón, con frecuencia por una obstrucción en las arterias coronarias-- y la insuficiencia cardiaca --afección en la que el corazón no puede bombear suficiente sangre al resto del cuerpo-- causan más del 75% de las defunciones por este motivo.
Sanitario y social
De este modo, el Gobierno regional quiere llamar la atención de los extremeños sobre unos problemas que no solo tienen secuelas sanitarias, sino también sociales, sobre todo por su coste económico. Este es el caso del infarto agudo de miocardio (IAM) al que la Administración extremeña califica como "un importante problema de salud", a causa tanto de la "alta mortalidad y morbilidad que genera", como por su "coste social y económico".
Además, la nota destaca la diferencia que existe en el riesgo de sufrir este problema, e incluso fallecer como consecuencia del mismo, por géneros. En este sentido, apunta que por cada mujer que ingresa en un hospital extremeño con este tipo de infarto, ingresan dos hombres que, además, son de media más jóvenes que ellas. De hecho, entre el 2002 y el 2004, se produjeron en Extremadura 2.388 defunciones por este motivo, de las cuales 1.382 (el 57,87%) correspondieron a varones y 1.006 a mujeres (el 42,13%) a mujeres.
En este periodo, se produjeron 4.361 altas hospitalarias con este diagnóstico en los ocho hospitales del SES. De ellas, 2.949 fueron protagonizadas por varones (el 67,62%), frente a las 1.411 de las mujeres (el 32,35%), o sea, que los hombres ingresados por esta causa fueron más del doble. En cuanto a la diferencia de edad, la media para ambos sexos fue de 69,70 años, fijándose en los 72,56 en las mujeres, bastante por encima de los 66,91 del género masculino.
Finalmente, la duración media de la estancia hospitalaria por estos ingresos asciende a 10 días, sin que haya en este caso diferencias significativas ni por géneros, ni por grupos de edad. 10 días que, previsiblemente, el Gobierno extremeño intentará reducir en el futuro con su nuevo sistema de gestión hospitalaria.
