En fechas cercanas a las elecciones municipales, es común que aparezcan casos en los que se inflan los censos con residentes foráneos. Ante estas anomalías, la Oficina del Censo Electoral, dependiente del INE, ha comunicado a la Junta Electoral Central, los datos de 25 de los 187 pueblos españoles sospechosos de irregularidades en sus censos, ya que ni siquiera han contestado en el plazo debido a los requerimientos que se les solicitaban.

En estos casos, la Oficina del Censo Electoral traslada a la Junta Electoral Central, como organismo superior, la información sobre ciertos ayuntamientos en los que se ha registrado un aumento extraordinario de los empadronamientos cerca de las elecciones, que los responsables municipales no justifican debidamente.

De este modo, es la Junta Electoral la que se ocupa de solicitar esa información.