El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, ha asegurado que la sociedad española confía cada vez más en esta institución, tal y como reflejan los sondeos en los que los ciudadanos la sitúan en los primeros puestos de confianza.
Múgica señaló como dato significativo el importante aumento de quejas presentadas ante el Defensor del Pueblo, que el año pasado superaron las 39.000, mientras que en el 2004 se presentaron unas 28.990, lo que supone un 27% más.
Entre las reclamaciones más habituales, Múgica apuntó los problemas vinculados a la educación, salud y las demoras en los tribunales de justicia. Además, destacó la "cada vez más habitual" queja sobre la degradación del medio ambiente.
Asimismo, el representante de los ciudadanos señaló que éstos perciben la independencia del Defensor del Pueblo, añadiendo que se trata de una figura que trabaja con independencia del poder ejecutivo, legislativo y judicial, pero con el necesario respeto, "nunca desde el aislamiento ni desde la soberbia institucional".
Múgica también recordó que la institución que preside promovió, desde su creación, 19 recursos de inconstitucionalidad y 12 de amparo. De los referidos a aspectos inconstitucionales, seis se estimaron en su totalidad, tres parcialmente, seis fueron desestimados, dos desistidos y otros dos están pendientes de sentencia.
Las características de origen de esta institución, aseguró Múgica, le otorgaron un crédito de confianza inicial. No obstante, añadió, "la figura del Defensor necesitaba demostrar una utilidad práctica". Las encuestas, la práctica diaria de este órgano y el aumento creciente del número de quejas de los ciudadanos, confirman, a su juicio, que se está en el camino correcto.
