No podemos seguir así". Con estas palabras definió ayer el presidente de la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex), Ramón Díaz Farias, la situación económica de los ayuntamientos de la región, que se encuentran "asfixiados" por las cargas que suponen para las arcas municipales la prestación de unos servicios a sus ciudadanos --como es el mantenimiento de los centros educativos o de las viviendas de promoción pública, la ayuda a domicilio o la gestión de entidades como los conservatorios de música-- que en realidad les corresponden a otras administraciones, ya sean la autonómica o la estatal.

Por ello, ante el inicio de las negociaciones entre los ayuntamientos y la Junta de Extremadura para determinar cuáles son las competencias que asumirá cada una de las administraciones, los gobiernos locales van a hacer de este planteamiento un "requisito imprescindible" y, por lo tanto, no van a abordar el traspaso de competencias mientras las arcas municipales no estén saneadas.

CONTADORES A CERO Díaz Farias subrayó ayer tras la reunión de la Comisión Ejecutiva de la Fempex la necesidad, por tanto, de que "los contadores se pongan a cero" y, aunque comentó que a día de hoy no se puede cuantificar dicha deuda, cifró en aproximadamente 200 millones de euros el gasto que supone para los ayuntamientos extremeños la prestación de servicios que no les son propios, lo que supone el 30 % de su presupuesto total.

"El endeudamiento real que tienen los ayuntamientos no puede pasar desapercibido", recalcó el dirigente municipal, que insistió en que esta reivindicación se compensará únicamente cuando las administraciones a las que corresponden las competencias que han generado un déficit presupuestario para los municipios las cubran por completo.

Los municipios, que no se niegan a asumir parte de esta deuda, exigen a la Junta la puesta en marcha de fórmulas que permitan sanear las cuentas municipales. Será en el mes de septiembre, fecha en la que se celebrará una reunión de la Comisión de Competencias y Servicios, de la que forma parte también la Junta, cuando los ayuntamientos pondrán sobre la mesa una cifra concreta. Para llegar a este punto, la Fempex remitirá a todos los municipios un formulario en el que éstos deberán detallar los servicios impropios que tienen asumidos y cuáles han sido las consecuencias que ha provocado en sus cuentas.

La intención de la Fempex, no obstante, es que una vez que se resuelva este asunto, las negociaciones con la administración regional vayan a buen puerto, de tal manera que se puedan incluir algunas competencias en los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el próximo año 2009.

El municipalismo, no solo el extremeño sino a nivel nacional, ya ha expresado en anteriores ocasiones su disconformidad con el sistema actual de reparto de fondos públicos, en el que los ayuntamientos han quedado como la "hermana pobre" de las administraciones frente al Estado y las diferentes comunidades autónomas.

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