La norma de calidad del ibérico supondrá un importante esfuerzo de adaptación para el sector, según explicó Elena Diéguez, presidenta de la asociación de criadores de porcino ibérico Aeceriber, aunque los productores se verán beneficiados en el futuro al poder garantizar la calidad a los consumidores.

Según señaló, las cifras que se manejan sobre fraude en el 80% de los productos que ahora se venden como ibéricos "no es real", y explicó que lo que existe "es mucha gente que ahora mismo no está adaptada a la norma, pero sólo porque es nueva, no porque exista una voluntad generalizada de engañar".

Diéguez explicó que las directrices recogidas en la ley de calidad engloban todo el proceso de crianza de los animales y elaboración de los derivados, desde el origen, hasta la trazabilidad, el manejo y los sistemas de transformación, "y no se limita a recoger unas disposiciones en materia sanitaria", como ha ocurrido en otros sectores cárnicos.

Por ello, la presidenta de Aeceriber comentó que las exigencias "son muy similares a las que tienen las denominaciones de origen, que, a partir de ahora, podrán imponer unas normas más específicas y duras si lo estiman conveniente".

GARANTIA AL CONSUMIDOR

Asimismo, comentó que, pese a la dureza de los controles "un sector que ha remontado crisis como la de la peste porcina africana también saldrá de esta".

En cuanto a los beneficiarios de la norma, Diéguez manifestó que "la transparencia y rigor es una garantía de futuro para todo el sector".

Asimismo, afirmó que los principales beneficiados serán los consumidores, que dispondrán de toda la información para que los productos etiquetados como ibérico cumplan realmente las condiciones de pureza de raza y crianza.

También, por las propias exigencias, quedarán fuera los que ahora comercializan productos ibéricos de animales con apenas un 25% de pureza y criados en intensivo, "lo que contribuirá a la conservación de la raza ibérica autóctona y a la pervivencia de un ecosistema como el de la dehesa", cuyo futuro, sin una rentabilidad económica asociada, podría peligrar.