El ataque con fuego de mortero que sufrió en la pasada madrugada la base de la coalición en Diwaniya, en el centro-sur de Irak, no causó daños, informó ayer a EFE el portavoz de la oficina de prensa del Estado Mayor del Ejército Polaco, Zbigniew Staszkow. A la 1.20 de la madrugada, hora local, fueron atacados los campamentos Foxtrot y Eco en Diwaniya, donde se encuentran los efectivos logísticos españoles que ultiman la retirada de Irak.

"Los proyectiles no hicieron blanco en los edificios de la base ni en los dos campamentos mencionados, y gracias e ello no se registraron bajas de ninguna naturaleza entre los soldados de la coalición", informó Staszkow.