Los 400 euros prometidos por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a todos los contribuyentes comenzarán a llegar a los bolsillos de los ciudadanos en la próxima nómina, la del mes de junio. Como han recordado desde la Agencia Tributaria, organismo dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda, esta compensación --con la que el Ejecutivo trata de aliviar la situación económica de las familias por la incidencia de la crisis financiera y de precios-- no se realizará mediante un pago único, sino mediante deducciones en el dinero que cada mes Hacienda retiene del salario o de la pensión en concepto de Impuesto sobre la Renta (IRPF).

De esta manera, en la próxima nómina el ejecutivo aplicará una deducción de 200 euros a todos aquellos que llevan tributando desde el 1 de enero. Así, si habitualmente Hacienda le retiene 300 euros de su sueldo mensual, este mes solo serán 100. Los otros 200 euros comprometidos por el Gobierno se irán aplicando de la misma forma en las nóminas del segundo semestre, a una media de 33 euros cada mes.

Lo mismo ocurrirá con los pensioneistas y los autónomos, aunque en este caso la rebaja se aplicará sobre la paga trimestral, con 200 euros en julio, y el resto, dividido en dos bloques de 100 euros, en octubre y enero del próximo año, el 2009.

En el caso de aquellas personas cuyas retenciones no llegan a los 200 euros que Hacienda deducirá en junio, se les aplicará el total de la retención. Es decir, que si de su nómina un trabajador paga en concepto de IRPF 140 euros mensuales, este mes no contribuirá con un solo euro. El resto del dinero hasta los 400 euros, es decir, los 260 que le quedan por cobrar, se los irán rebajando del impuesto de la renta en las nóminas que reciba hasta fin de año.

Por su parte, según explicaron el viernes fuentes de la Agencia Tributaria, aquellos que durante este año no hayan tributado lo suficiente --al menos 400 euros--, bien porque hayan comenzado a trabajar en los últimos meses o porque el tipo que se les aplica es muy bajo, podrán deducirse los 400 euros del Gobierno en la declaración de la renta que presenten el próximo año.