El Consejo Confederal de CCOO, máximo órgano de gobierno del sindicato, convirtió ayer el debate interno sobre el apoyo a la huelga general contra la guerra de Irak en un choque de fuerzas entre las distintas organizaciones.

La resolución del líder de CCOO, José María Fidalgo, contraria a secundar el paro convocado por UGT, ganó con el apoyo del 59,3% del Consejo a la propuesta alternativa presentada por los sectores que aspiran a sustituirle en la dirección el próximo año.

La resolución que propuso el exsecretario de Organización del sindicato, Rodolfo Benito, pretendía dejar libertad a las organizaciones para que pudieran secundar la huelga del 10 de abril con paros entre 15 minutos y dos horas. Esta propuesta, que contó con el apoyo del líder del sector crítico de CCOO, Agustín Moreno, obtuvo el 40,6% de los votos.

PROPUESTA DE PARO

El líder del Metal, la federación más poderosa de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, mandó ayer un comunicado donde propone convocar un paro general laboral. En declaraciones a este diario concretó que estaría dispuesto a negociar con UGT una huelga general pero no el 10 de abril sino en fechas más próximas al Primero de Mayo. "No creo necesaria la huelga pero estoy abierto a discutir con UGT cualquier propuesta", aseguró.