Los partidos pequeños ya han asumido que no pueden combatir con las grandes maquinarias en las elecciones regionales, pero cuando se trata de las luchas en pequeños espacios, en los pueblos, la cosa cambia.

Tanto que en los comicios municipales del domingo los partidos independientes y minoritarios se convirtieron en la tercera potencia local de Extremadura. Y es que tras la cita con las urnas, y gracias a sus más de 50.000 votos, han sumado nada menos que 268 ediles, con lo que están únicamente por detrás del PSOE (1.685) y el PP (1.235). Además, su evolución ha sido espectacular en apenas 4 años.

Si se comparan los datos del domingo con los del 2003, el PSOE se mantiene, con diferencia, como primera fuerza local, aunque ha perdido 57 concejales. El PP se consolida en el segundo escalón con 18 ediles más que hace cuatro años, aunque este dato no es demasiado positivo porque los populares esperaban heredar los más de 50 escaños municipales de Extremadura Unida, con quien se han presentado en coalición.

Tercera potencia

El tercer lugar lo ocupan independientes y otros partidos minoritarios, al haber pasado de 172 concejales a 268, especialmente a través de la plataforma que concentra a decenas de agrupaciones, Independientes por Extremadura (IPEX), que en su primer asalto se ha hecho con 85 concejales.

De esta forma, los independientes superan a IU, que en el 2003 alcanzó 194 concejalías y esta legislatura tendrá 139, es decir, que ha perdido 55 ediles.

Si se comparan las mayorías alcanzadas, los resultados también cantan . IU ha logrado 3 mayorías absolutas y 3 relativas en los consistorios extremeños. Mientras, los independientes presumen de 15 mayorías absolutas y 10 relativas.

Pero si es cierto que se ha consolidado el poder local independiente , no lo es menos que también ha quedado demostrado que esa fuerza no es suficiente a la hora de planificar su entrada en el Parlamento autonómico.

Acceso parlamentario

Algo especialmente complicado en Extremadura, donde primero se cayeron de la Asamblea los partidos regionalistas y ahora ha ocurrido lo propio con IU, de forma que sólo estarán PSOE y PP.

En esta ocasión se presentaba por primera vez IPEX, que ha cosechado unos pobres resultados. Entre otras cosas porque mientras en las elecciones locales ha sumado 12.706 votos --muy lejos de la cifra necesaria para lograr el primer escaño--, en las autonómicas alcanzó 8.639 apoyos.

La escasez de fondos, la dificultad que encuentran a la hora de hacer que su mensaje llegue a la población y, sobre todo, la falta de una estructura social, hacen que en las grandes citas su pequeñez se convierta en un lastre insalvable.