Populares y socialistas extremeños iniciaron ayer una polémica en cuanto a la declaración por el Gobierno central de zona catastrófica para el entorno afectado por los incendios de las comarcas de Las Villuercas y Los Ibores. Mientras que el PP ha solicitado al Ejecutivo central las medidas necesarias para la citada declaración, además de exigir al presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra que "dé la cara" y explique qué se ha hecho en materia de prevención, desde el PSOE se ha acusado a los populares de intentar sacar rédito político de los incendios.

El portavoz del PP extremeño, José Antonio Monago, reclamó al Gobierno el mismo trato para Extremadura que para Guadalajara, después de que Zapatero anunciara la próxima declaración de zona catastrófica de las localidades afectadas por el incendio de esta provincia castellanomanchega.

Monago argumentó que la región ha perdido una "joya" medioambiental y consideró que la superficie arrasada tiene "un mayor impacto" que la de Guadalajara, por lo que exigió al Gobierno "las mismas medidas" para Extremadura que las que aplicará en otras comunidades.

Asimismo, emplazó al presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, a que "no eche balones fuera" demandando al Gobierno más competencias en materia de incendios porque, según afirmó Monago, las tiene todas.

Por su parte, el secretario de organización del PSOE, Ramón Ropero, manifestó ayer que su partido "está harto de la actitud demagógica y déspota del PP extremeño", ya que lo único que pretende es "sacar rédito político a costa de los incendios".

EN EL 2003 Ropero recordó que en el 2003, cuando se produjeron los incendios en Valencia de Alcántara que arrasaron 30.000 hectáreas, el PP no pidió al Gobierno que declarase los lugares afectados como zona catastrófica, "porque gobernaba el Partido Popular".

El dirigente socialista acusó además a los populares de estar absolutamente "desinformados", por no saber que el decreto aprobado el pasado viernes por el Gobierno en el que se aprobaban medidas urgentes para paliar desastres naturales, sustituye a la anterior normativa de declaración de zona catastrófica por otras medidas que dan cobertura jurídica a las zonas afectadas por los incendios.