Los políticos extremeños manifestaron su pesar por la muerte del Papa. Si la misma noche del fallecimiento de Juan Pablo II tanto Rodríguez Ibarra como Saponi fueron los primeros en mostrar sus condolencias, en la jornada de ayer fueron más políticos los que se manifestaron en el mismo sentido.

Así, el presidente de la Asamblea de Extremadura, Federico Suárez, envió un telegrama de condolencia al nuncio del Vaticano en España, Manuel Monteiro de Castro, para que le haga llegar a la Santa Sede el pesar de todos los extremeños. El mismo telegrama también se remitió al arzobispo y a los obispos de la región.

Carlos Floriano, presidente del PP de Extremadura, mostró al arzobispo y obispos de Extremadura sus condolencias, y destacó la fortaleza humana y el testimonio personal demostrado en su pontificado.

Por su parte, Juan Ignacio Barrero, expresidente del Senado, también se unió a las condolencias extremeñas y recordó que, en dos ocasiones, se había entrevistado con el Santo Padre, a quien define como excepcional.

Nuevas Generaciones de Badajoz invitó a los jóvenes extremeños a rezar por el alma de su santidad.