El partido Zaragoza-Málaga de ayer tuvo su anécdota. El portero del Zaragoza, César Sánchez, natural de Coria, tuvo que salir ayer corriendo del partido que jugaban en la capital maña porque le avisaron de que su mujer estaba de parto de su segundo hijo.

César, con un tono jocoso, comentó a los medios que ellos no tenían tantos problemas en ponerle el nombre al niño, y que le llamaría como el padre.