El Grupo Parlamentario Popular presentó ayer un escrito en la Asamblea para que la Cámara "otorgue el amparo y manifieste la solidaridad" con los miembros del PP que están sufriendo "acoso y persecución por parte de otros miembros destacados de la Cámara y de los partidos", ante la postura del Gobierno en la guerra de Irak, según explicó ayer el secretario regional del PP, José Antonio Monago.

Además, los populares remitirán una carta al secretario regional socialista, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y el coordinador regional de IU, Manuel Cañada, para que insten a militantes y simpatizantes a cesar "cualquier comportamiento violento, y los condenen".

En este sentido, recordó que al presidente del PP extremeño, Carlos Floriano, "se le ha llamado asesino en el Parlamento y en Perales del Puerto", y que "han aparecido dianas en la sede de Mérida". Además, dijo, que ha habido incidentes en Arroyo de la Luz, Olivenza, Quintana de la Serena, Badajoz y Don Benito.

En cualquier caso, Monago pidió "respeto" al PP, y manifestó que "hay momentos en que no queda más remedio que actuar para evitar males mayores".

En réplica a estas declaraciones, el vicepresidente de la Junta, Carlos Sánchez Polo, indicó que "los socialistas tenemos experiencia en este tipo de situaciones, como cuando se llamaba a Felipe González asesino y se decía que era la X de los GAL". En todo caso, indicó que el PSOE condena cualquier ataque a los miembros del PP y a sus sedes, aunque agregó que "resulta obsceno que quieran aparecer como víctimas, después de lo que se está viendo que ocurre en Irak".