La Audiencia Nacional ha condenado al abogado cacereño Pablo Vioque a 18 años de cárcel y al pago de una multa de 1,3 millones de euros como cabecilla de una organización de narcotraficantes que trató de introducir en España, a través de las costas gallegas, un alijo procedente de Sudamérica de unas dos toneladas de cocaína. Otros trece acusados han sido condenados a penas de entre 3 y 17 años.

El pasado lunes y una vez deliberado el fallo de la sentencia, la sala dictó un auto ordenando la prisión de Vioque por estos hechos, quien permanece encarcelado desde el 3 de mayo de 2001 tras ser detenido en la operación denominada Más madera , así como de los otros cuatro acusados sobre los que han recaído las penas más elevadas y que se encontraban en libertad bajo fianza. Se trata de Manuel Carballo Jueguen, Luis Jueguen Vilas, Francisco Paz Rodríguez y José Antonio Padin, quienes ha sido condenado a diez años.

La sentencia considera probado que, a finales de 1990, Vioque y Carballo decidieron importar "una elevada cantidad de cocaína" desde Sudamérica, para lo que encargaron el transporte a dos intermediarios Manuel Vázquez y Juan Carlos Sotelo, conocidos como Los Piturros , a quienes encomendaron la compra de un barco. A finales de enero de 1991, Los Piturros adquirieron el buque Dobell con la intermediación de José Antonio Padín y, tras contratar como tripulación a dos ciudadanos griegos, quienes se encuentran huidos, zarparon del puerto de Vigo con rumbo a Portimao, a donde llegaron a mediados de febrero. Desde allí partió hacia Sudamérica para la recepción de un cargamento de dos toneladas de cocaína. A primeros de mayo de 1991, cuando el barco se aproximaba a las costas españolas, otra embarcación salió a su encuentro para proceder al trasvase del alijo. Después de un intento fallido, ambas embarcaciones contactaron a unas 40 millas de la costa a la altura de Estaca de Bares, donde realizaron el transbordo de la carga. Un barco se dirigió hacia la costa para que una zodiac recogiera los fardos.

Dada la gran cantidad de fardos y ante el riesgo de naufragio, Iglesias y Díaz decidieron amarrar la mayor parte en aguas próximas a la entrada de la ría y transportaron a tierra otros doce fardos con 300 kilos. Un temporal rompió las amarras del resto de los fardos, que contenían 1.400 kilos de coca, y días más tarde aparecieron flotando cerca de Cedeira, por lo que fueron incautados.

En 1995 resultó detenido Sotelo por la introducción de este alijo, mientras que Vázquez logró huir, y seis meses después, al no haber cobrado ninguno por el transporte de la coca, decidieron delatar a Vioque y relataron todo lo ocurrido al entonces juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño.

Vioque, a quien la Guardia Civil acusó en enero de urdir desde la cárcel una trama para matar al teniente fiscal Antidroga, Javier Zaragoza, fue detenido en mayo de 2001 como presunto responsable en España de una red de distribución mundial de coca, desarticulada en la operación Más Madera , en la que se intervinieron 1.800 kilos de esta droga.