El sector inmobiliario tiene verdadera urgencia en que el Gobierno ponga en marcha el fondo de 30.000 millones de euros destinados a inyectar liquidez en las entidades financieras. No en vano el presidente del lobi de las promotoras G-14, Pedro Pérez, afirmó ayer que necesitan financiación, ya que se encuentran "en recesión" y que el sobreajuste actual en la construcción va a tener incidencia en la economía.

Pérez aplaudió la decisión del Ejecutivo de crear este fondo a cargo del Tesoro, ya que permitirá que las entidades comiencen a prestar dinero. "Pronto veremos a los bancos conceder créditos y poner suelo a la caída que estamos experimentando". Si no se reactiva la actividad inmobiliaria, será difícil estabilizar la economía, porque el sector es una parte importante del PIB "y no hay sectores alternativos", dijo el presidente del G-14. En su opinión, será imposible volver a tasas de crecimiento del 2% y del 3% sin la aportación de la construcción.

La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, fue más allá y lanzó un llamamiento a las entidades financieras para que apuesten por el futuro de este sector y ofrezcan préstamos a las empresas ya que, su intervención, "es crucial" para que superen la crisis.

La actividad inmobiliaria no puede pararse y es necesario seguir construyendo en un marco de equilibrio entre la propiedad y el alquiler, dijo la ministra. Sin embargo, Pérez ve difícil seguir esta recomendación, ya que las ventas de viviendas han caído un 60%. Según sus cálculos, las constructoras han debido terminar más de 200.000 pisos que no se pueden vender, con un valor de 55.000 millones.

Esta cifra puede quedarse corta a la vista de lo que ayer comentaba el presidente de la asociación de promotores y constructores de España (APCE), Guillermo Chicote, comentaba ayer en un curso. En su opinión, este año se volverán a terminar 640.000 viviendas en España, una cifra similar a la del año pasado, porque, a pesar de la crisis, las empresas han preferido finalizar muchos pisos iniciados hace 24 meses. Este volumen podría elevar el estoc de pisos sin vender por encima del millón de unidades.