El objetivo del Ministerio de Industria es construir un almacén central de residuos radiactivos que guarde los desechos de las nueve instalaciones de energía nuclear existentes en España: Almaraz I y Almaraz II, Zorita, Trillo, Cofrentes, Garoña y Ascó I, Ascó II y Ascó III. Su intención es que el ATC --como se denomina-- entre en funcionamiento en el 2010 como muy tarde, ya que a partir de ese año empezarán a rebosar las piscinas aislantes donde se almacena la mayor parte del combustible gastado.

Que tenga 25 hectáreas disponibles, que no haya una especial actividad sísmica y que esté al margen de inundaciones o de cualquier otro contratiempo de carácter natural son prácticamente los únicos requisitos técnicos que debe cumplir el municipio que aspire a acoger el almacén temporal centralizado (ATC).

Según Industria y Enresa, albergar este cementerio nuclear ofrece atractivos de sobra: una inversión inicial de 540 millones de euros y trabajo para 300 personas durante la construcción, además de 100 cuando esté operativo --20 serán científicos--. Los candidatos tienen hasta el 27 de septiembre para presentar su solicitud oficial.

Hasta el momento el único centro de almacenamiento existente en el país es El Cabril, situado en el término municipal de Hornachuelos (Córdoba). En él se acumula residuos considerados de baja intensidad.