Las direcciones regionales del Partido Popular y el PSOE han alcanzado un pacto para proponer que el sueldo de los alcaldes extremeños esté en función del número de habitantes del municipio. Además, este acuerdo, según confirmó ayer el diputado popular Javier Casado, incluye otros dos puntos, como la liberación de diputados en el Parlamento regional y la propuesta de liberación de los portavoces de la oposición en los principales consistorios.

En el caso de la homologación salarial, Casado señaló que se harán "recomendaciones, no imposiciones" para que el sueldo de los ediles se mantenga dentro de unos límites según su población. De esta forma, populares y socialistas han elaborado unas tablas retributivas que deberán servir como orientación a los ediles.

Asimismo, se propondrá que en los principales ayuntamientos extremeños y las dos diputaciones provinciales sean liberados los portavoces de la oposición, aunque la decisión corresponderá a las propias instituciones.

Por otra parte, Casado afirmó que este pacto tiene un último punto y es que el PP se ha comprometido con los socialistas a presentar en el Parlamento regional el estatuto de expresidentes a principios del 2004.

Esta norma supondría que una vez finalizado su mandato el presidente de la Junta cobraría durante un periodo similar a la mitad de ese mandato una asignación económica que oscilaría entre el 60% y el 80% de su sueldo. El estatuto garantiza también el cobro de una pensión después de la jubilación y el reconocimiento de distinciones honoríficas.

Sin embargo, la portavoz del PSOE, Lola Pallero, declaró que "no hay ningún tipo de acuerdo firmado en este sentido con el Partido Popular". El diputado Francisco Fuentes manifestó que sería una iniciativa "lógica" y que los socialistas la estudiarán cuando la presente el PP.

Por su parte, Víctor Casco, miembro de la Presidencia de Izquierda Unida, criticó la posibilidad de que se apruebe este estatuto puesto que entiende que sólo se busca "asegurar la jubilación" de Juan Carlos Rodríguez Ibarra.