De la mano. Así es como asistirán el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y el líder regional del PP, Carlos Floriano, al proceso que se iniciará en el mes de septiembre por el cual se abrirá un debate en el que participarán el Gobierno central y todas las comunidades con el fin de reformar el modelo de financiación autonómica. Lo harán así al entender ambos que ante un asunto que preocupa tanto al Gobierno como a la oposición regional, estos deben apartar sus discrepancias y transmitir un mensaje "único" desde la comunidad autónoma con el fin de defender al máximo los intereses de los extremeños.

Ambos líderes políticos mantuvieron ayer en Mérida una reunión convocada con el fin de analizar la evolución de los acuerdos de legislatura alcanzados con el PP al comienzo del mandato de Fernández Vara, relativos a cuestiones como la agricultura, la educación, la política municipal y el fortalecimiento del sistema financiero de la región. Entre estos asuntos se coló la cuestión de la financiación autonómica, sobre la cual el gobierno y la oposición ya han venido mostrando en las últimas fechas que tienen más puntos en común que en contra.

Y es que, al margen de que la reunión adoptara un cariz institucional al ser convocada en la sede de la Presidencia de la Junta, el caso es que también supuso la unión de los máximos responsables a nivel regional de los dos partidos mayoritarios en Extremadura, el PSOE y el PP.

POSICION UNICA A pesar de que del encuentro no salió ningún documento concreto, lo cierto es que tanto Floriano, que compareció primero ante los periodistas, como Fernández Vara, después, abogaron por la necesidad de que Extremadura traslade al debate sobre la financiación autonómica una posición "inequívoca" que cumpla el requisito último de defender los intereses de la comunidad autónoma.

Por ello, el presidente extremeño se comprometió a mantener un contacto fluido con el líder del PP --tanto si Floriano repite en el cargo como con la persona que pudiera sustituirlo tras el Congreso del PP previsto para el mes de septiembre-- para de esta forma compartir toda la información que vaya suscitando el proceso de reforma del sistema de financiación autonómica con el partido de la oposición. Fernández Vara propuso asimismo que la defensa de los intereses de la región no se quede solo en tierras extremeñas. Por este motivo, animó al líder de la oposición, como dijo que él también hará, a tratar de influir en las direcciones nacionales de sus respectivos partidos en Madrid.

PUNTOS EN COMUN El PSOE y el PP de Extremadura parten desde una posición muy similar con respecto a la reforma del modelo de financiación. En primer lugar ambos comparten que el actual sistema es positivo para la región, así como que la forma en que ha comenzado el proceso supone un motivo de preocupación para los extremeños. De esta forma, Floriano expresó su rechazo a las fórmulas "egoístas" e "insolidarias" procedentes de comunidades como Cataluña, que considera que de llevarse a cabo, podrían acabar con el principio de la solidaridad entre los territorios recogido en la Constitución.

Por otro lado, defienden que las negociaciones se mantengan en el Consejo de Política Fiscal y Financiera entre todas las partes implicadas, y rechazan un diálogo bilateral entre el Gobierno y cada una de las regiones. Con respecto a los criterios sobre los que se debe fundamentar el reparto de los fondos, ambos dirigentes son conscientes de que la población debe tener un importante peso, por cuanto un aumento en el número de habitantes influye en el gasto necesario para prestar los servicios a los ciudadanos. Sin embargo, según comentó Floriano, este criterio debe quedar "matizado" por cuestiones como el envejecimiento y la dispersión de esta población, que son dos elementos que igualmente influyen en un mayor gasto público en la prestación de los servicios.

Ambos dirigentes destacaron el buen clima con el que se desarrolló la reunión. Así, Fernández Vara resaltó su satisfacción por haber hecho "todo lo que se tenía que hacer", tanto para sacar adelante una posición única de Extremadura sobre la financiación autonómica, como por el avance producido en el resto de los pactos, como son los trabajos realizados para analizar una posible fusión de las cajas de ahorro, la creación de una nueva Ley de Educación, la definición de las competencias municipales, así como la defensa de los intereses de los agricultores.