La España actual debería estar por encima de lo que ocurra esta noche. Incluso en el doloroso caso de una derrota, no significaría un punto y aparte. Es el tercer equipo más joven de la Eurocopa --con Puyol, Marcos Senna y Joan Capdevila como veteranos treintañeros-- y, por tanto, con recorrido para llegar al Mundial de Suráfrica del 2010 con la misma base. Solamente Xavi Hernández y Marchena tendrán entonces ya los 30 años cumplidos. A ellos se puede unir el jovencísimo Bojan Krikic, el valor con más proyección que, según los planes iniciales de Aragonés, hoy debería haber estado en Viena, pero que al final renunció por cansancio y falta de madurez. El equipo tiene gran futuro.