Lucha sin cuartel a los ladrones de móviles. Ese es el espíritu con el que las operadoras de telefonía móvil y el Gobierno central comenzaron a trabajar hace tiempo y que por fin ha dado sus frutos.

Durante los últimos meses los ministerios de Ciencia y Tecnología, Interior y Sanidad y Consumo han colaborado con los operadores de telefonía móvil y los fabricantes de los propios teléfonos para tratar de alcanzar lo que hasta no hace demasiado era una utopía, es decir, que sea imposible volver utilizar los móviles robados, lo que si funciona desincentivará en gran medida un mercado negro que cada vez es más floreciente en toda España.

En mayo de este año comenzaron a realizarse pruebas piloto en Madrid y Barcelona. Tuvieron éxito y el próximo 30 de junio será una realidad a lo largo de todo el país: los teléfonos móviles robados podrán ser inutilizados para siempre a través de un complejo dispositivo que en Europa actualmente sólo se aplica en Francia y Reino Unido y que se activa a través de una simple llamada telefónica. Este innovador sistema de seguridad se está aplicando de forma escalonada y en Extremadura ya funciona desde hace una semana.

COLABORACION DEL SECTOR

Como primer paso las empresas se han comprometido a crear una lista conjunta con todos los terminales sustraidos para poder bloquear los aparatos de forma más eficaz. Mientras, los fabricantes han añadido a los ya conocidos PIN y PUK un nuevo código que refuerza la inviolabilidad del móvil. Es el IMEI, un número de identificación del terminal válido en todo el mundo, es decir, algo parecido al número de bastidor de los vehículos.

Una vez que las empresas han realizado las inversiones necesarias para adaptar sus equipos, redes y plataformas a este proyecto común, la clave reside desde ahora en denunciar lo antes posible la sustracción del teléfono. De esta forma, en caso de robo el cliente debe avisar en primer lugar a su compañía telefónica --sea la que sea--, que suspenderá su línea e iniciará de forma automática el bloqueo del terminal en cuanto se le facilite el IMEI. Posteriormente podrá denunciar el caso ante la Policía o la Guardia Civil aportando su número de teléfono y el IMEI.

En sólo 72 horas, tras cruzar los datos con los del resto de las operadores y realizar verificaciones técnicas, el teléfono móvil no podrá volver a utilizarse, al menos en teoría.

CAMPAÑAS INFORMATIVAS

Este nuevo modelo de seguridad irá acompañado de una campaña informativa que se realizará por todos los medios posibles desde la Administración, los operadores, los fabricantes y los distribuidores.

De forma paralela se han iniciado otras campañas con un objetivo aún más importante, como es potenciar la prevención y evitar incluso los posibles robos con unas simples medidas de precaución. El lema no puede ser más contundente: "¡Que no te dejen sin móvil!".