Viene de la página anterior

Tras dos años al frente del Centro Extremeño de Tecnologías Avanzadas, Raúl Ramos tiene como principal objetivo difundir su labor y acercarlo a los ciudadanos, sin descuidar las investigaciones punteras en las que este organismo participa. No en vano afirma que el CETA ha llegado "para quedarse", confiando en la continuidad de la financiación pública y sin descartar la ampliación a la privada y explica a EL PERIODICO cuáles son las metas alcanzadas y por conseguir.

--En pocas palabras, ¿qué es el CETA-Ciemat?

--Es un centro de cálculo del Ministerio de Ciencia e Innovación. Tenemos un millar de ordenadores y unos 400.000 gigabytes de almacenamiento, que ponemos a disposición de los grupos de investigación y científicos que los necesiten para realizar los cálculos de sus estudios. También les asesoramos para planificar la utilización de las máquinas.

--¿Qué proyectos destacaría?

--Tenemos varios, destacaría el Ibercivis, por la colaboración que supone por parte de los ciudadanos que ponen a disposición de los investigadores sus ordenadores durante sus tiempos ociosos, cuando no hacen nada, para hacer cálculos para distintos grupos de investigación. Los participantes pueden ver qué estudios hay, aparte de aprender un poquito de qué son (hay estudios sobre la búsqueda de energía nuclear limpia, diseño de fármacos... También es muy interesante el proyecto EELA-2, a través del cual estamos construyendo una red de centros de cálculo como el nuestro por toda América Latina. De hecho, es la primera de este tipo que se pone en marcha.

--Todas esas iniciativas demuestran la gran potencialidad del centro, ¿pero no está aún un tanto desaprovechado?

--Es una potencialidad que efectivamente hay que explotar. Existen muchos estudios y decisiones políticas y científicas que apuntan definitivamente hacia que el uso de ordenadores, que pueden ser de centros como este o de otro tipo, va a ser básico para el desarrollo de la ciencia. Por eso, una de nuestras misiones es contribuir a que los distintos ámbitos científicos puedan hacer uso efectivo de estas infraestructuras.

De hecho, estamos comprobando que hay una potencialidad muy grande de proyectos y comunidades de científicos que quieren usar estas máquinas pero aún no saben cómo (cómo estructurar sus datos, sus aplicaciones...) Poco a poco, estamos empezando a ayudar a distintas comunidades científicas a utilizarlas y sí que vemos que hay muchas que las van a necesitar y ya las necesitan.

--Después está la divulgación entre la sociedad, porque no muchos extremeños conocen este centro.

--Sí, tenemos una misión de divulgación a la sociedad en general. De hecho, el proyecto Ibercivis es un medio para hacer esta divulgación, porque el usuario, además de aportar su computador, puede entender qué hacen una serie de grupos científicos que de otro modo no conocería.

También la adquisición de una cúpula para la proyección de sesiones de planetario --el primero de Extremadura-- va en esa línea, sobre todo teniendo en cuenta que podremos trasladarla por toda la región. Servirá, por un lado, como medio de difusión de ciencia en general y, por otro, también nos dará a conocer a la sociedad extremeña.

--Un obstáculo para ello es que tratan temas que es complicado entender si no se es experto.

--Es muy complicado, muy complicado. De hecho, una de las misiones de la divulgación es intentar acercar, por un lado, al científico y la máquina y, por otro, al científico y el ciudadano. Es decir, entender al científico y ponerlo en lenguaje asequible para cualquier persona. Pero en la experiencia que vamos teniendo nos damos cuenta de que todo es explicable. La cúpula e Ibercivis serían nuestro primeros pinitos en este sentido.

--Ese sería uno de sus retos para el futuro, ¿qué otros tienen?

--Sí, aparte de la divulgación hacia la sociedad, también buscamos que estas infraestructuras se usen en todos los campos de la ciencia (por ahora está acotado a solo algunos). Además, queremos contribuir a que haya más centros de cálculo como este, ya que somos un centro relativamente modesto por número de máquinas, pero por eso también tenemos esa función más de expansión de este tipo de instituciones.