El aviso lanzado en los últimos días por el Banco de España de la posibilidad de que se produzca un ajuste "brusco" en el precio de la vivienda tras varios años de crecimiento sin freno ha devuelto a primer plano el debate sobre los efectos que para la economía de las familias podría tener el pinchazo de lo que se denomina burbuja inmobiliaria . En Extremadura se han puesto en el mercado entre principios de los noventa e inicios de la presente década 113.000 nuevas viviendas, según un estudio de La Caixa con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Esta expansión inmobiliaria, alentada por una demanda muy fuerte de los pisos, ha elevado hasta 587.000 el número de viviendas en Extremadura. En el periodo 1991-2001, Extremadura ha sido la sexta comunidad autónoma española con un incremento más importante al aumentar el parque de viviendas casi un 25%. Las zonas con mayor crecimiento son, por este orden, Canarias, La Rioja, Madrid, Navarra, Cantabria y Extremadura. Por contra, son País Vasco, Galicia, Aragón y Asturias donde se el parque de viviendas ha experimentado crecimientos menores.

EL SINGULAR CASO EXTREMEÑO

El estudio de La Caixa hace una mención especial para el caso extremeño, donde parece claro que se ha producido una burbuja inmobiliaria, que puede pincharse bruscamente o desinflarse poco a poco. "Las zonas en declive demográfico y de menor dinamismo económico presentan en general aumentos del parque de viviendas muy inferiores a la media excepto en Extremadura, donde las viviendas secundarias (las de uso estacional) y desocupadas explican más del 50% del crecimiento total".

De las 113.000 nuevas viviendas que se crearon en la última década en Extremadura, 50.000 son de uso principal, 23.000 son secundarias y otras 40.000 aparecen en las estadísticas oficiales como desocupadas. La llegada a la coyuntura inmobiliaria actual en la región --en la que prácticamente todos los pisos de cualquier promoción de viviendas se venden antes de que se coloque la primera piedra del edificio-- obedece a dos tipos de factores: los demográficos y los económico-financieros.

EMANCIPACION DE LOS JOVENES

En Extremadura apenas se ha producido variación de población en la última década --está situada en en entorno de 1,1 millones de habitantes--, por lo que la creación de nuevos hogares ha venido principalmente por la emancipación de jóvenes. "Más incidencia ha tenido, en cambio, la llegada a la edad matrimonial de la generación nacida a partir de primeros de los sesenta", se recoge en el estudio de La Caixa.

Paralelamente a los factores demográficos han actuado los de índole económica y financiera. "En el plano económico, la importante creación de empleo a partir de 1994 (que ha permitido una creciente incorporación de la mujer al mercado de trabajo) y la mejora de los salarios reales han reforzado la renta real de las familias y, por tanto, su capacidad de gasto", recoge La Caixa.

La notable y permanente bajada de los tipos de interés en los últimos años ha facilitado el acceso de las familias a los préstamos hipotecarios, pero paralelamente el incremento de los precios de la vivienda ha elevado sobremanera la parte del salario que se destina a afrontar el pago del crédito. Otro de los factores es el favorable trato fiscal que tiene la compra de la vivienda frente al alquiler. Una hipoteca o una cuenta vivienda son productos financieros que reportan interesantes deducciones a la hora de hace la declaración de la renta. Por último, la rápida revalorización de los pisos ha hecho que aflore la figura del comprador-inversor, que sólo busca obtener plusvalías.