Extremadura genera ya más del 18% del total de energía solar fotovoltaica de España, tras el acelerón que se dio el pasado año a los proyectos motivado por la previsión de que en septiembre del 2008, al cambiar la regulación, disminuyesen las primas de producción (efectivamente, pasaron de 44 céntimos por kilovatio-hora a 34 céntimos). Así, la región, donde este tipo de energía comenzó a implantarse en el 2003 pero de forma muy puntual, pasó en un solo año a casi cuadriplicar la potencia instalada en plantas fotovoltaicas: de 57 megavatios (MW) a 400 MW (la mitad que un reactor de Almaraz). En toda España, la potencia instalada oficial es de 2.200 MW, aunque la Comisión Nacional de Energía estima que puede llegar a 3.130 MW.

De este modo, la región ya puede generar 720 gigavatios-hora por año con paneles fotovoltaicos, lo que equivale al consumo anual de 170.00 familias.

Actualmente, en Extremadura funcionan 141 plantas con una potencia superior a 1MW, que suman más de 391 MW, y 138 de menos de 1 MW, que suman otros 7 MW. Estas son las instalaciones ubicadas en la región que, según los datos de la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente, están inscritas en el Registro de Instalaciones de Producción de Energía Eléctrica en Régimen Especial. Este requisito es indispensable para poder recibir la subvención que lleva aparejada la producción de energía fotovoltaica, aunque ha resultado no ser una garantía del todo fiable de que estuvieran vertiendo energía a la red.

Esto último es lo que ha ocurrido en algunas comunidades en las que la Comisión Nacional de Energía ha detectado plantas inscritas antes del 28 de septiembre del 2008 (límite para cobrar la anterior prima y cuando se registró un aluvión de solicitudes) que ni siquiera habían empezado a ser construidas. Pero ninguna de estas irregularidades se han detectado en Extremadura, destacan desde la consejería, ni en la inspección que llevó a cabo la comisión nacional ni en otra posterior efectuada por la propia Administración autonómica, en la que --asegura el propio consejero, José Manuel Navarro-- solo se descubrió una caso anómalo (una planta a la que le faltaban el 20% de las placas).

COLABORACION CON RIGOR. "Hemos sido muy rigurosos con el cumplimiento de la legislación, sí que hemos colaborado con los promotores de fotovoltaicas para facilitarles la tramitación (que es compleja), pero siempre dentro de la legalidad", proclama el director general de Planificación Energética, Manuel García. En cuanto a la celeridad para aprobar proyectos antes del cambio de normativa (y, por tanto, habilitarlos para cobrar la anterior prima), García indica que en Extremadura sí se han aprobado puestas en marcha parciales --por ejemplo, autorizar una potencia de dos megawatios con arreglo al anterior decreto, cuando este aún estaba vigente, en una planta proyectada para soportar cuatro (los otros dos se ajustarían a la nueva normativa, aclara el director)--, pero nunca se ha aprobado un proyecto no finalizado.

Así lo confirman, además, los datos aportados por las dos principales eléctricas que operan en la región, Endesa e Iberdrola, y que coinciden aproximadamente con los que maneja la Administración regional. Estas dos compañías controlan el 85% de la red de distribución de Extremadura y, como cabe esperar, son las cuentan con un mayor número de plantas fotovoltaicas conectadas. De hecho, según los datos de la consejería, Iberdrola cuenta con 152 instalaciones conectadas (76 de más de un megavatio y 86 de menos), mientras que la compañía contabiliza 184 (83 de más de un megavatio y 101 de menos). La diferencia entre las cifras se explica porque algunos proyectos que se presentan como uno único a la Junta precisan varios puntos de conexión, pero la potencia instalada registrada por la Administración y la eléctrica coincide (en torno a 200 MW en total), lo que indica que no hay ninguna planta inscrita en el registro que no esté en funcionamiento y, por tanto, elimina cualquier sospecha de fraude.

Lo mismo ocurre con los datos de Endesa, a la que estarían conectadas 87 plantas (61 de más de un megavatio y 26 de menos) de acuerdo con los datos de la consejería y 91 según la compañía (64 de más de un megavatio y 27 de menos), que en ambos casos arroja una potencia total de unos 190 MW. Las 61 plantas restantes (seis de más de un megavatio y 28 de menos, con una potencia de unos 10 MW en total) están conectadas al resto de distribuidoras que hay en Extremadura (Pitarch, Endecoria, Eléctrica de Monesterio...).

OPINION DEL SECTOR También en el sector energético extremeño, la opinión generalizada es que Extremadura ha logrado mantenerse al margen del fraude de las fotovoltaicas, que algunos comienzan a comparar con el del lino (vinculado al cobro de subvenciones europeas por este cultivo). Es la visión que comparte Enrique Fernández, secretario general de la Federación de Industrias Afines (FIA) UGT, que asegura que, en este sentido, "hay que felicitar a la Administración extremeña porque no se han dejado colar goles a la hora de autorizar la puesta en marcha de fotovoltaicas y no tiene por qué haber dudas sobre su funcionamiento".

Igualmente esta es la impresión del director de la Agencia de la Energía de Extremadura, Fernando López, o del gerente del recientemente creado Clúster de la Energía de Extremadura, Gonzalo Barrantes, que afirman que los profesionales del sector en Extremadura sitúan a la región fuera de toda sospecha con respecto al fraude de las fotovoltaicas. Al mismo tiempo, destacan la importancia de este tipo de proyectos como fuente de creación de empleo en la región; en el caso de las fotovoltaicas sobre todo durante su construcción, pero en las termosolares --que ahora toman el relevo, según estas fuentes"-- también durante su explotación.

EN PROYECTO De hecho, Extremadura ya cuenta con tres centrales termosolares en construcción y otras cinco que han obtenido la autorización administrativa para ponerse en marcha. Además, hay un centenar que han solicitado la autorización administrativa recientemente o están pendientes de obtenerla y otras 72 que han pedido el reconocimiento como instalaciones de producción acogida al régimen especial.

Asimismo, las fotovoltaicas, aunque difícilmente mantendrán el crecimiento registrado el año pasado, suponen un gran número de proyectos en marcha en Extremadura. De hecho, aparte de los 25 proyectos de instalaciones de más de un megavatio que han obtenido la autorización administrativa y los 32 que están en ejecución, otros 328 han solicitado el citado permiso y 485 más han pedido su registro en el régimen especial. En cuanto a las plantas de menos de un megavatio, 223 han solicitado la autorización administrativa, 85 están pendientes de obtenerla y 406 han pedido su inclusión en el régimen especial.