Dos de las principales novedades que la Consejería de Sanidad planea poner en marcha en el marco de la atención a la diabetes están relacionadas con la prevención de dos de las complicaciones más frecuentes de esta enfermedad: la retinopatía (que afecta a la retina y que puede provocar ceguera) y el pie diabético (alteración o ulceración de estas extremidades, que puede desembocar en su amputación).

Para prevenir la retinopatía, Sanidad pretende poner en marcha un programa --que arrancará de forma experimental el año próximo en un centro de salud aún por determinar-- a través del cual los médicos realizarán retinografías (imágenes de la retina) digitales a sus pacientes diabéticos, que examinarán oftalmólogos tras recibirlas a través de la red. Así se podrán detectar antes las retinopatías y, por tanto, mejorar su tratamiento.

Asimismo, con objeto de prevenir y mejorar la atención del pie diabético, Sanidad tiene previsto facilitar una especie de ´cheques´ para que los diabéticos puedan acudir al podólogo, de forma similar a lo que ocurre con el Plan de Atención Dental Infantil.