Primera reunión ordinaria del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) --que coordina las actuaciones del Estado y las comunidades en materia sanitaria y que ayer se celebró en Mérida-- presidida por Trinidad Jiménez como ministra de Sanidad y Política Social, pero centrado en el mismo tema que motivó sus dos últimas reuniones: la gripe A. El ministerio y las autonomías han pactado la compra masiva de vacunas contra el nuevo virus que, según la ministra, estarán disponibles en otoño --ya se está negociando su compra-- y "para todos los que las necesiten".

El Ministerio de Sanidad ya está negociando con diversos laboratorios farmacéuticos la compra de la dosis, que llevará a cabo de forma centralizada y adelantando el pago que después deberán abonar las comunidades, con los laboratorios que trabajan en el desarrollo de la vacuna. La recentralización puntual de esta competencia, tiene por objetivo recibir los primeros pedidos "al mismo tiempo que el resto de países europeos", explicó Jiménez.

Ahora es la Comisión de Salud Pública del SNS la que debe cuantificar cuántas dosis se comprarán, en función de "criterios absolutamente científicos", resaltó la ministra, que rechazó dar ninguna cifra porque aseguró que "no hay nada decidido" y que dependerá de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

ESTIMACIONES Sin embargo, Jiménez admitió que, como informaron algunos consejeros, en la reunión de ayer se barajó qué inversión supondría la compra de vacunas para el 30% de la población --en torno a 15 millones de dosis-- por parte de las comunidades (unos 294 millones de euros), más un 10% adicional del que se haría cargo el ministerio (65 millones). Al respecto, resaltó que estas cifras son solo "estimaciones", basadas en la campaña contra la gripe estacional y en los precios que ofrecen las empresas farmacéuticas en la actualidad, pero que ninguno de estos aspectos están cerrados todavía.

En este sentido, el secretario general de Sanidad, Jaime Martínez Olmos, recordó que "estamos ante un nuevo virus, cuya evolución hasta ahora es favorable y sus consecuencias leves", pero que debe ser controlado porque no se sabe cuál puede ser su evolución. Por ello, aún no se sabe qué tipo de personas precisarán la vacuna y, por tanto, no es posible predecir cuántas dosis se precisarán.

En todo caso, Jiménez reiteró en repetidas ocasiones que se contará "con todas las vacunas que se necesiten" y que previsiblemente estarán disponibles a principios del próximo otoño. Ello pese a las dificultades de las comunidades para hacer frente al pago --derivadas, según las quejas de algunos consejeros como la de Canarias, Mercedes Rondón, de la paralización de la reforma del modelo de financiación--, por las que el ministerio se hará cargo en primera instancia del pago, que después devolverán las autonomías.

Justo sobre la sostenibilidad del sistema sanitario público --por la que el presidente extremeño, Fernández Vara, aseguró el martes estar preocupado--, la ministra defendió que es "una prestación pública de máxima relevancia, interés y necesidad", por lo que aseguró que "más allá de las dificultades de las comunidades, el Estado siempre garantizará la sanidad pública, con la excelencia demostrada a lo largo de los años".