Una vez concluido el paro de los transportistas llega el momento de analizar las pérdidas y de hacer balance de las consecuencias sufridas por la economía extremeña tras una semana complicada para el tránsito de camiones por las carreteras. Un primer dato ofrecido ayer por la vicepresidenta primera del Gobierno regional, Dolores Pallero, revela que las listas del paro aumentaron entre el inicio y el fin de la huelga, los días 9 y 16 de junio, en unas 1.700 personas en la comunidad autónoma.

Además, ya se conocen las primeras estimaciones realizadas por los agricultores del sector de la fruta, el más perjudicado por el paro, debido a que la inmovilización de los camiones ha provocado un retraso en la salida de las cosechas hacia el mercado nacional y también el internacional, destino este último de más del 65% de la producción.

En respuesta a varias interpelaciones de los diputados del Grupo Popular en el Pleno de la Asamblea, Pallero apuntó que por el momento el Gobierno regional no dispone de datos suficientes para valorar con rigor las consecuencias del paro convocado por los transportistas, en protesta por el aumento del precio de los carburantes. Aunque dijo que hasta el mes de julio no habrá cifras cerradas en este sentido, avanzó que las listas del desempleo en Extremadura han sufrido las consecuencias de la falta de transporte de mercancías por carretera.

Según dijo, "los únicos datos que se conocen hasta el momento" sobre la incidencia de la huelga en la economía extremeña reflejan que entre los días 9 y 16 de junio "se registraron 1.700 parados más" en la región, la mayor parte de ellos procedentes del sector de la construcción, que se ha visto perjudicado por la escasez de materiales. No obstante, el gerente de la Federación Provincial de Empresarios de la Construcción (Fecons), Víctor Valiente, declaró a EL PERIODICO que la crisis que atraviesa este sector, y que se está traduciendo en la destrucción de miles de empleos, no es achacable a los días en los que el reparto de mercancías se ha visto ralentizado, aunque reconoce que algunas obras hayan podido sufrir "problemas puntuales" por la falta de materiales.

ACTUACION DE LA JUNTA. Desde las filas del Grupo Popular, el diputado Juan Parejo criticó la "dejación" de la Junta de Extremadura ante las pérdidas ocasionadas a los agricultores y empresarios extremeños, mientras que la vicepresidenta del Gobierno regional defendió el papel realizado por el ejecutivo autonómico "a pesar de no tener la responsabilidad en las causas ni en las consecuencias de este paro".

Respecto al sector agrícola, el consejero del ramo, Juan María Vázquez reconoció la consecuencias negativas que esta protesta ha provocado a los productores extremeños, especialmente a los fruticultores, que se encuentran en plena campaña de recolección, y añadió que las consecuencias del paro, de haber continuado, podrían haber adoptado tintes de "tragedia" para la región. En cualquier caso, el Gobierno extremeño mantiene unas perspectivas optimistas con respecto a la situación provocada por las movilizaciones de los transportistas.