Los caudales de los ríos medidos en las once estaciones hidrológicas que hay en Extremadura han descendido un 67% respecto a la situación de hace justo un año, según los datos facilitados por el Ministerio de Medio Ambiente. Así, en la primera semana de junio del 2004 estos puntos de control registraban el paso de 518 metros cúbicos por segundo, mientras que ahora no llegan a 173 metros cúbicos por segundo.

La situación es muy distinta según las cuencas. En las estaciones del Tajo (nueve en total) la caída de caudal es del 70% (149 metros cúbicos por segundo frente a los casi 500 de hace un año), mientras que en el Guadiana, que cuenta con dos controles, el descenso es de un 5% (23,4 frente a 24,6 metros cúbicos por segundo de junio del 2004).

A CERO EN MONFRAG E Asimismo, las distintas estaciones muestran grandes diferencias. Los puntos más preocupantes se sitúan en el Tajo a la altura de Cedillo, que ha pasado de un caudal de 61 metros cúbicos por segundos a no apreciarse siquiera el paso de agua. Idéntica situación se vive en este mismo río en el punto de control de Torrejón, que pasa de 164 metros cúbicos por segundo a cero, y en el Tiétar también en Torrejón, que ha pasado de 45 metros cúbicos a cero. En estas dos últimas estaciones la situación es especialmente grave, porque ambas se encuentran en Monfragüe, y podría afectar al caudal ecológico de los cauces que riegan el parque natural.

Menos grave, aunque también con importantes mermas, es el estado del Tajo por Valdecañas, donde el caudal ha pasado de los 116 metros cúbicos por segundo de hace un año a apenas once ahora, o en el Tiétar por Rosarito, donde en junio del 2004 se registraban 13 metros cúbicos por segundo y en este momento no se llega a uno.

Por contra, parece que se está soltando agua en los embalses del Alagón, ya que en las dos estaciones de este río (Gabriel y Galán y Valdeobispo), los caudales han crecido notablemente respecto al año anterior, lo que ha supuesto mermas importantes en el primero de los embalses citados, cuyas reservas han caído en 16 hectómetros cúbicos en solo una semana.

Por lo que se refiere a la cuenca del Guadiana, en Cíjara cae el caudal un 77% (de casi once metros cúbicos por segundo a 3,5), mientras que en Baajoz aumenta un 42%, pasando de 14 a 20 metros cúbicos por segundo.

CAIDA DE LAS RESERVAS La situación de los caudales se corresponde con los descensos de las reservas de agua, cuando el verano aún no ha empezado. De este modo, las presas extremeñas de las dos cuencas están al 61% de su capacidad, veinte puntos menos que hace un año.

El estado de las reservas es mucho más preocupante en los 14 embalses de la cuenca del Tajo, donde se está a la mitad de las posibilidades, 21 puntos por debajo de lo que ocurría en junio del 2004, y que tiene acumulados 3.250 hectómetros cúbicos.

En la del Guadiana los embalses están al 69%, y guardan 5.500 hectómetros cúbicos.

Casi la mitad del agua disponible en los embalses extremeños se localiza en dos grandes presas, Alcántara y La Serena. La primera dispone de casi 1.500 hectómetros cúbicos (menos de la mitad de su capacidad), y la segunda 2.250, el 70% de lo que puede acumular.