El autor del atentado con granadas que, en la madrugada de ayer, causó la muerte a un soldado norteamericano y heridas a otros 15 en un campamento en Kuwait, fue uno de sus compañeros. El soldado, musulmán y que, al parecer, cometió el ataque porque se opone a la guerra en Irak, fue inmediatamente detenido e interrogado.

El incidente ocurrió a la 1.45 de la madrugada, hora local, en el campo Pensilvania, base de la 101 División Aerotransportada del Ejército de EEUU. El agresor lanzó granadas contra dos tiendas, hiriendo a 16 soldados, cuatro de ellos de gravedad. De estos cuatro, uno murió poco después de que llegaran las ambulancias. El mando central estadounidense confirmó que "el sospechoso es un soldado adscrito a la división".

TESTIMONIO PERSONAL

"La carnicería fue considerable", señaló Jim Lacey, de la revista norteamericana Time, que cubre la información asignado a esta división y que estaba durmiendo en una de las tiendas de la base cuando ocurrió el atentado.

Lacey ofreció su testimonio personal: "Me despertó la primera explosión. Diez segundos después se produjo la segunda y los soldados empezaron a gritar: ´Salid fuera, salid fuera´. Una mujer que estaba en mi tienda, situada a unos 10 metros de donde se produjo el estallido, gritó: ´Me han tocado´. Un trozo de metralla de la granada se había incrustado en su pierna. Salí corriendo de mi tienda y me encontré con un caos absoluto".

Según el periodista, empezaron a sonar las alarmas avisando de un ataque con misiles Scud y los soldados y el resto del personal asignado a la base empezaron a correr hacia los búnkeres. Algunos soldados se colocaron las máscaras de gas. Pero pronto se pudo constatar que el ataque nada tenía que ver con los Scud.

Según fuentes militares, el soldado sospechoso admitió su responsabilidad inmediatamente. "Es musulmán y parece que, simplemente, está contra la guerra", indicó un oficial que no quiso ser identificado. Otras fuentes militares señalaron que el agresor llevaba días mostrando un cierto grado de insubordinación, por lo que sus superiores decidieron no llevarlo a Irak.

El ataque fue considerado inicialmente como un "atentado terrorista" por portavoces militares. La cadena de televisión CNN mostró ayer una fotografía del soldado arrestado, un joven negro y con la cabeza totalmente rapada, arrodillado delante de una tienda con las manos esposadas detrás de la espalda, en el momento de su detención.