Antes de iniciar la búsqueda de un herbicida contra el camalote, Universidad de Extremadura, Junta, Confederación del Guadiana y empresas privadas trataron de encontrar un uso alternativo a las toneladas que cada año se extraen del río Guadiana y sus afluentes y canales. Así, desarrollaron tres investigaciones que han constatado que esta planta, que por sí misma no cubre las necesidades nutricionales del ganado, sí se puede utilizar para fabricar pienso para ovejas; e incluso han probado que el aparato digestivo de estos animales elimina la capacidad de germinación de las semillas. También han demostrado que podría utilizarse para fabricar abono a través de compostaje, "aunque su uso no es muy recomendable porque pueden quedar semillas que podrían extender la plaga", explica Trinidad Ruiz Téllez, ahora directora general de Educación Superior de la Junta y que coordinó estos proyectos desde la Uex. También lograron resultados positivos para aprovecharla como biomasa, aunque necesitaría un tratamiento complementario para eliminar las semillas. En China ya se usa como tejido para bolsos y en Cuba han estudiado si puede alimentar a los cerdos.