Fueron algo menos de 20 minutos de rueda de prensa en la Ferraz extremeña . Dos decenas de minutos que arrancaron a las 11.07 y que estuvieron cargados de gran expectación y marcados por el incesante sonido de los teléfonos móviles, la presencia de buena parte de la cúpula del PSOE regional y la habitual claridad con la que se expresa el presidente de la Junta de Extremadura.

Juan Carlos Rodríguez Ibarra tardó 5 minutos en comunicar claramente su decisión, que llegaba a las 11.12 con una frase contundente: "Me permito anunciar mi renuncia a la candidatura de la Presidencia de la Junta por el PSOE".

"A veces hay que saber irse a casa con dignidad, y eso es lo que yo pretendo hacer no presentándome en las elecciones de mayo del 2007", aseveró. La causa, el accidente que sufrió en noviembre del año pasado --así es como se refiere siempre a su infarto-- y que le ha dejado una salud buena pero amenazada por el estrés.

Jugador amonestado

Para explicar su estado, recurrió al símil que ya ha utilizado otras veces, el de un jugador de fútbol con tarjeta amarilla y que si vuelve a ser sancionado abandona el partido. "Tiene la misma categoría, la misma calidad, está en forma, tiene buena salud... pero no mete la pierna" y, por lo tanto, "es un jugador casi inútil en el campo". "Esta es mi situación: No meto la pierna suficientemente", apostilló.

Por lo que se refiere a cuál será su actitud una vez que se retire utilizó el ejemplo de un autobús. Así, cuando su partido "decida quién es la persona que debe aspirar a representar a Extremadura me sentaré en el asiento de atrás y no hablaré". Y es que, añadió, "cuando uno habla lo único que hace es molestar al conductor y el autobús se conduce siempre desde el asiento delantero", de forma que "desde el asiento trasero solo se perturba al conductor y se puede provocar un accidente".