Solo 11 kilómetros faltan para que Cáceres quede completamente unida por autovía con Trujillo y la Autovía del Suroeste (A-5). Así ocurre desde que ayer entrara en servicio el tercer tramo (Plasenzuela-Santa Marta de Magasca) de la A-58, casi un año antes de lo previsto, puesto que su plazo inicial de ejecución (31 meses) finalizaba en noviembre del 2009. Así lo destacó la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, que aprovechó la inauguración del último intervalo de la esta carretera para adelantar la llegada de nuevos proyectos de infraestructuras en Extremadura, financiados con la parte destinada para este ámbito del fondo especial para reactivar la economía anunciado por el Gobierno, si bien no precisó en qué consistirán dichas iniciativas.

El tramo de la A-58 abierto ayer tiene 14,1 kilómetros de longitud y su trazado es sensiblemente paralelo a la actual N-521, mantieniéndose al sur de esta. La obra conecta con el tramo de la misma autovía Trujillo-Plasenzuela, en servicio desde el pasado 16 de octubre, y con la N-521 a través del enlace de Santa Marta de Magasca, dando continuidad al itinerario Trujillo-Cáceres hasta la puesta en servicio del último tramo de la nueva autovía, previsto para el año próximo.

MAS DE 155 MILLONES EN TOTAL Este tramo ha supuesto una inversión de más de 45 millones de euros, incluidos más de tres millones destinados a llevar a cabo las expropiaciones necesarias en la zona. En total, la A-58 --que medirá algo más de 47 kilómetros-- cuenta con una inversión de más de 132 millones de euros, contabilizando solo los presupuestos correspondientes a la obra, es decir, excluyendo expropiaciones, proyectos, etcétera, según precisó la delegada del Gobierno, que estimó que el coste total supera los 155 millones.

Pereira destacó que la obra de la A-58 estará terminada "a lo largo del 2009", sin fijar exactamente una fecha concreta puesto que, según recordó, la finalización del tramo inaugurado ayer estaba prevista para noviembre del año próximo, por lo que aseguró que su objetivo es que la nueva aurovía esté completamente disponible lo antes posible. Asimismo, indicó que está en marcha el estudio informativo de la conexión entre la A-58 y la A-66 por el sur de la capital cacereña, con objeto de compararla después con la opción norte, ya que la intención es vincular no solo estas dos autovías, sino también la que en el futuro unirá Badajoz y Cáceres.

Pereira también aseguró que ya se está trabajando en la duplicidad de la N-521 hasta Malpartida de Cáceres, así como que la conversión en autovía de esta carretera hasta Valencia de Alcántara está en estudio previo. Quizá estos podrían ser algunos de los proyectos que, según adelantó la delegada del Gobierno, se beneficiarán de la financiación prevista en el fondo especial de 11.000 millones de euros para reactivar la economía, 3.000 de los cuales serían para infraestructuras.