Pese al crecimiento registrado en los últimos años, Extremadura continúa siendo una de las comunidades autónomas con menor índice de criminalidad.

La última estadística del Ministerio del Interior así lo confirma. Y es que durante los primeros cinco meses del año se registraron en la región sólo tres homicidios dolosos --con premeditación-- de los 183 que se produjeron en todo el país. Los datos de Interior, aportados al Congreso de los Diputados en una respuesta parlamentaria, cifran en un 5,7% el descenso del número de homicidios cometidos en España durante los cinco primeros meses del año en relación al mismo periodo del 2002.

El Gobierno central especifica que entre enero y mayo de este año se registraron 183 homicidios dolosos consumados y que fueron conocidos por las fuerzas de seguridad del Estado. La comunidad en la que se contabilizaron más delitos de este tipo fue la de Madrid, con 41, por delante de Andalucía, con 36, y Cataluña, con 16, trece de ellos en Barcelona. En el País Vasco se perpetraron en ese mismo periodo catorce homicidios, doce en la Comunidad Valenciana, once en Castilla y León, diez en Canarias y ocho en Murcia, informa Efe.

Seis se cometieron en Castilla-La Mancha y en Galicia, cinco en Navarra, cuatro en Aragón, tres en Extremadura y La Rioja, dos en Asturias, Baleares y Melilla y uno en Cantabria y Ceuta.

ESTADISTICA CONFUSA Pero si hay algún campo en el que las estadísticas pueden mirarse con dos caras, ése el de la criminalidad. De esta forma, por ejemplo, el año pasado la delincuencia se incrementó más de un 6% en la comunidad extremeña, con lo que fue la cuarta región con un mayor aumento. Aún así siguió siendo una de las regiones con una menor tasa en este sentido.

Algo parecido ocurre con los primeros datos que han salido a la luz referentes a este mismo año. En el primer semestre se han registrado 13.970 delitos y faltas, lo que supone un descenso del 6,69%, según el Ministerio del Interior. Esto supone, por ejemplo, que en la región se producen 77 sucesos al día o 2.328 al mes.

Además, en ese periodo la eficacia policial se incrementó en dos puntos en Extremadura, un dato que resulta muy positivo teniendo en cuenta que ya el año pasado era superior a la media estatal.

PEQUEÑA DELINCUENCIA Sin embargo, bajaron los delitos pero aumentaron las faltas, es decir, la pequeña delincuencia, como la definen los policías de la región.

Tras esta aparente mejora se ocultan también, entre otras cosas, el fuerte aumento de los robos de vehículos particulares y de los casos de violencia doméstica.