Las tropas extremeñas destacadas en Irak, que forman el grueso de la Brigada Plus Ultra, se mantienen desde el domingo en alerta máxima y pasan por sus momentos más críticos desde que desembarcaran en el país. El regreso de los soldados de Bótoa se mantiene de momento entre los días 15 y 27 de este mes.

Las bases de Diwaniya y Nayaf, donde se encuentran 1.300 militares españoles --unos 600 extremeños--, siguieron recibiendo ayer ataques de milicianos shiís, que disparaban de manera intermitente granadas de mortero y ráfagas de fusil. Según el Ministerio de Defensa, no se han registrado bajas entre los soldados españoles. El ministro en funciones, Federico Trillo, y los mandos militares siguieron las operaciones desde su despacho e informaron telefónicamente a Aznar, y al próximo responsable de la cartera ministerial, José Bono.

Los soldados al mando del general del acuartelamiento extremeño de Bótoa Fulgencio Coll se encontraban acantonados en la Base España en Diwaniya y Al Andaluz en Nayaf. Mantenían la alerta máxima. Las patrullas fueron suspendidas ante el riesgo de recibir ataques en las calles de ambas poblaciones. La exacerbación de los shiís tras el baño de sangre del domingo en Nayaf, donde murieron 20 iraquís, un soldado norteamericano y otro salvadoreño al repeler el ataque de los milicianos contra el cuartel de la brigada Plus Ultra, ha convertido la zona en un territorio hostil para las tropas.

El general Coll centraba ayer sus esfuerzos en devolver la normalidad a Nayaf. Pero el propio Ministerio de Defensa admitía en un comunicado oficial que no resultaba nada fácil porque los milicianos del Ejército del Mahdi, que iniciaron el domingo la revuelta y atacaron la base Al Andaluz y cuartel general de la Defensa Civil Iraquí, situado a 700 metros de la misma, se han apoderado de la ciudad y la policía local ha desaparecido.

Desde la tarde del domingo, cuando los shiís se alzaron en armas cumpliendo órdenes de su líder religioso Moktada al Sadr de protestar por la detención del clérigo radical de Nayaf, Mustafá al Yakubi, la ciudad ha quedado bajo el control de los milicianos. La detención, ayer, del propio Al Sadr por efectivos norteamericanos ha incrementado la tensión y los disparos contra las bases españolas. Prosiguen mientras tanto las operaciones de relevo del contingente español. Ayer salieron del aeropuerto de Almería 150 militares.